HUESCA | Javi Hernández ha despertado una ilusión tremenda en El Alcoraz. El mediapunta cedido por el Espanyol tiene maniobras que recuerdan a uno de los mejores jugadores que han pasado por el Huesca: Samu Sáiz. El catalán con ascendencia aragonesa (un cuarto oscense) es capaz de echarse al equipo a la espalda. Cualquier balón recibido por el joven jugador de 20 años puede acabar en una ocasión. Coge el balón, se gira y encara a la portería rival con un desparpajo inaudito en los últimos años.
En esta semana en la que Hidalgo ha tenido que inventarse a futbolistas para poder sobreponerse a tanta baja, Javi Hernández puede ser el gran descubrimiento. El entrenador había madurado su entrada en el equipo. Hasta la jornada siete, el habilidoso mediapunta no tuvo minutos. El entrenador quiso adaptarlo para el fútbol profesional a base de entrenamientos. Javi demostró tener paciencia y el resultado ha llegado cuando más lo necesitaba el equipo altoaragonés.
Hidalgo descubre a Javi Hernández
Hidalgo ha descubierto a dos futbolistas muy validos para su once titular. El primero es Javi Hernández y el segundo es Diego González. El central parece haber encontrado una posición nueva en el centro del campo. El jugador castellonense se adaptó a la perfección en esa posición. Tuvo 35 minutos brillantes hasta que vio la injusta cartulina roja. El futbolista llegado desde el Andorra parece que sumará muchos minutos esta temporada, ya sea en el eje de la defensa o en la medular como complemento de Sielva.