ZARAGOZA | Sergio Bermejo partió como titular y disputó 80 minutos en la primera derrota de la temporada del Real Zaragoza el pasado lunes ante el Racing de Ferrol. Fue una de las novedades en el once en la pequeña revolución de Fran Escribá, pero el futbolista madrileño desperdició esa oportunidad. Pese a haber contado con tan solo dos titularidades en lo que va de curso, está siendo una de las decepciones en este arranque. No termina de demostrar las cualidades técnicas que atesora.
Es cierto que en el tramo final de la temporada pasada el extremo alcanzó su mejor nivel con el Real Zaragoza, pero la realidad es que en más de tres temporadas vistiendo la camiseta blanquilla no ha logrado la regularidad que debería para convertirse en un futbolista diferencial para la categoría.
Después de su progresión en la segunda vuelta de la anterior campaña, se esperaba que Sergio Bermejo siguiera en esa línea o incluso que diera un paso adelante para consolidarse como un futbolista importante en el proyecto de ascenso del Real Zaragoza. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. El futbolista de 26 años ha dado un paso atrás tanto en su rendimiento como en los planes de Fran Escribá, un entrenador que confía plenamente en este futbolista como ya demostró hace unos meses alabándolo en varias ruedas de prensa.
Hasta que fue sustituido el pasado lunes por Sergi Enrich en el minuto 80, el extremo zurdo se fue diluyendo paulatinamente sobre el terreno de juego. En la primera parte estuvo participativo por la banda derecha junto a Fran Gámez, pero no terminó de ser determinante en los últimos metros ni tampoco ganador en los duelos individuales. Tras el gol encajado en la segunda mitad, el Real Zaragoza necesitaba la magia de futbolistas como él, pero pasó desapercibido hasta que Fran Escribá se vio obligado a retirarlo del terreno de juego.
La llegada de nuevos futbolistas ofensivos con proyección y con experiencia en la categoría como Maikel Mesa, Manu Vallejo, Germán Valera o Víctor Mollejo le han cerrado la puerta de la titularidad. Después de tres temporadas para olvidar, los zaragocistas tienen ganas de ver sobre el césped a futbolistas que demuestren tener nivel para ascender a Primera División.
Una nueva oportunidad desaprovechada que muy probablemente le pasará factura. El aficionado del Real Zaragoza está muy descontento con su rendimiento, y todo apunta a que el próximo domingo en La Romareda regresará al banquillo para dejar su puesto a futbolistas que llegaron con la vitola de titulares como Maikel Mesa o Manu Vallejo.