El baloncesto vuelve a ser cruel e injusto con Lobe Huesca. De nuevo un triple del rival sobre la bocina sentenció el encuentro para dejar a los altoaragoneses con una amarga derrota. Siempre duele, pero cuando caes así, contra el líder, a quien le jugó durante (casi) todo el partido de tú a tú, en igualdad de condiciones y con falta de rotación pues todo es más doloroso. Eso sí, si contra el líder destierras la posición de ambos en la tabla, sabes que debes plantar batalla ante todos… y ganar a muchos. A pesar de ser día laboral alrededor de 800 personas arroparon al equipo. Los expeñistas Alberto Alocen y Luis Estiragues siguieron atentamente el partido desde el palco.
Fiel a su esquema, Santi Cerdán repitió una jornada más su quinteto inicial: García, Adom, Yarnoz, Lafuente y N’ Guessan. Ambos equipos iniciaron el choque de manera eléctrica, N’ Guessan machacando la canasta rival y los menorquines anotando sin fallo en sus primeras 4 acciones con Arroyo y Alderete como principales estiletes. Los de Javier Zamora toman las primeras rentas en el marcador (4-9). Yarnoz y Lafuente lo equilibraron con dos acciones llenas de casta y garra. Rubén de Celis irrumpió en pista y nuevamente imprimió una velocidad más el encuentro. Lobe corrió y tomó la delantera (13-11).
Los visitantes subieron líneas en defensa asfixiando los ataques verdiblancos. Un 2+1 de Gerard Rodríguez y una canasta sobre la bocina de Lafuente situaban el electrónico en una exigua renta peñista 18-17. Lobe Huesca arrancó el segundo cuarto con la misma intensidad con la que terminó el primero. Santi Cerdán, a pesar de la escasa rotación de la que dispuso, movió a sus jugadores de manera magistral y el equipo vivió unos minutos de gran acierto de cara a canasta.
Lafuente, de dulce y oro, volvió a marcarse un triple de 8 metros que daba una renta 6 puntos (28-22). Del lado visitante Arroyo mantuvo el tipo, anotando de todas las maneras posibles, desesperando a la defensa peñista. Nuevamente Lafuente salía al rescate con un robo de balón y posterior canasta. El técnico visitante pidió tiempo muerto con 36-27 para los de Cerdán. Lobe alargó la diferencia con un Yarnoz y Adom inspiradísimos en el tramo final. El descanso esperaba con una notable ventaja oscense (45-31)
Peñas, tras la reanudación, siguió sin dar respiro a sus oponentes. N’ Guessan se fajó, cual coloso, bajo el aro visitante y Adom desde el perímetro situó la máxima diferencia del partido: +18 (54-36). Como viene ocurriendo en las últimas jornadas, el técnico visitante ordenó situarse a su equipo en una defensa zonal 2-3, con los exteriores llegando a cualquier atisbo de lanzamiento. Una nueva desconexión afloró en el bando local. Los peñistas chocaron contra ese sistema, el equipo se atragantó, perdió balones y los visitantes, en un abrir y cerrar de ojos, liderados por Jackson y Arroyo redujeron la diferencia a -7 (64-57). Solo en los últimos 2 minutos la defensa torna a individual y Lobe vio aro con acciones individuales cercanas al aro. Volvieron los 10 puntos de ventaja, Jackson se encargó de reducir a 8 en la última jugada del cuarto (64-57).
Los oscenses, con el inicio del último periodo, empezaron a notar la escasa rotación. De Celis, García y Yarnoz se exprimieron en defensa, pero no era suficiente. Y Menorca cosió a triples al Lobe. Tomó de nuevo la delantera 66-67. Un 2+1 de Yarnoz recuperó la moral del equipo, el público vibró con cada acción y se convertía en el sexto jugador. 2 tiros libres de N’ Guessan a falta de 2m41s concedió una renta de 6 puntos, 77-71. La victoria estaba cerca, se tocaba. Sin embargo, todo se fue abajo. Dos triples de Molins, el último sobre la bocina enmudeció al Palacio. En su mejor partido, Lobe caía por 78-79.
Esto es el resultado de una ‘junta’ irresponsable… partido a partido todo el trabajo de los que quedan, se va por la alcantarilla…