El Huesca se la juega a una carta y le toca además bailar con la más fea. Los de Anquela visitan este fin de semana un campo inexpugnable.
La UD Levante es equipo de Primera División desde hace ya unas jornadas. Su paseo militar por la categoría de plata finalizará el próximo sábado en su estadio antes de volver a la Liga de las estrellas.
Consumado el ascenso, muchos fueron los que pensaron que el equipo se dejaría llevar. Lejos de lo esperado, los levantinistas siguen con paso firme en su feudo, donde no han perdido ningún partido esta temporada. Tan solo Reus, Cádiz y Getafe lograron sacar un punto del Ciutat de València.
En la última jornada, los de López Muñiz cayeron en casa del Lugo con un solitario gol del “pichichi” Joselu. Allí sí se notó que el líder de Segunda ya no se jugaba nada y que el ariete local quiere el trofeo individual para sus vitrinas. Pero en Valencia la historia cambia. En las últimas tres jornadas como local el Levante ha logrado triunfos ante UCAM (3-1), Girona (2-1) y Oviedo (1-0).
Ahora es el turno de los de Anquela. Un equipo de récord -logró encadenar 12 jornadas consecutivas sin perder- que debe romper la inmaculada racha del Levante en el Ciutat de València si quiere asegurarse un puesto en el ‘playoff’. Una tarea que se antoja compleja pero no imposible, porque como dijo Vadillo, “el Huesca se juega mucho más que su rival”. Eso se debe notar en el campo.