El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Rafael Louzán, ha visitado este lunes Zaragoza para comprobar de primera mano los avances de la ciudad en su preparación como sede de la Copa Mundial de la FIFA 2030. En su recorrido, ha mantenido una reunión con la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, y ha inspeccionado las obras del nuevo estadio de La Nueva Romareda.
Zaragoza, modelo de colaboración para el Mundial 2030
El encuentro entre Louzán y Chueca ha servido para reforzar la colaboración entre la RFEF, el Ayuntamiento de Zaragoza y las administraciones aragonesas, con el objetivo de asegurar el éxito de un proyecto de impacto global. Se ha destacado a Zaragoza como ejemplo de cooperación interinstitucional, con una planificación que podría inspirar a otras sedes del torneo.
“La Nueva Romareda no es solo un estadio, es un símbolo del compromiso de Zaragoza con el deporte y con la oportunidad de proyectar nuestra ciudad al mundo”, ha señalado Chueca, subrayando la importancia de esta infraestructura para el futuro de la ciudad.
La Nueva Romareda, un estadio de vanguardia
Uno de los puntos principales de la visita ha sido la supervisión de las obras de La Nueva Romareda, que se convertirá en un estadio de última generación con capacidad para más de 43.000 espectadores. Este recinto cumplirá con los estándares exigidos por la FIFA, asegurando una experiencia inigualable tanto para jugadores como para aficionados.
Actualmente, el proyecto ha completado la Fase 1A, que incluyó demoliciones y cimentaciones en la zona de Gol Sur, y se encuentra en preparativos para el inicio de la Fase 1B, que arrancará en los próximos días.
Un legado más allá del Mundial
Tanto Louzán como Chueca han coincidido en que este proyecto no solo está pensado para el Mundial, sino que dejará un legado duradero en la ciudad. “Zaragoza no solo es una sede del Mundial, sino una referencia para el resto de ciudades implicadas en la candidatura”, han destacado.
Además, la alcaldesa ha resaltado el impacto positivo que tendrá el estadio en la ciudad: “Será un punto de encuentro para la ciudadanía y un motor de desarrollo económico y social”.
Con la visita del presidente de la RFEF, Zaragoza afianza su posición como una de las sedes más avanzadas del Mundial 2030 y reafirma su compromiso con un evento que transformará la ciudad y la proyectará a nivel internacional.