El Real Zaragoza ha adolecido gravemente de falta de gol en la primera vuelta. Únicamente 11 tantos, pero lo peor es que los aragoneses no han llegado al medio centenar en disparos a puerta.
Centrocampistas
Francho Serrano (9): El único sobresaliente de la plantilla, para el canterano. Quizá es una nota excesiva, pero por la complejidad del momento y su rendimiento, esa es la nota elegida. Activo del club que en un futuro puede llegar a costar muchos millones. Mejora el juego cuando pasa por sus botas, le pone sentido al poco fútbol ofrecido hasta la fecha por este Real Zaragoza y muestra una madurez y una inteligencia superior a lo habitual con su corta edad. Insustituible desde que pisó el verde allá por noviembre.
Eguaras (4): Pese a un último partido notable, el rendimiento del navarro está siendo demasiado pobre. Salió del once cuando parecía intocable e incluso Baraja se lo llevó al ostracismo. Volvió a escena con Iván y sigue en ella con JIM. Resguardado mejora y no podemos olvidar que es de los pocos con la calidad suficiente para batir líneas en la plantilla. El pase del tanto de Chavarría previo a las vacaciones te lo firman muy pocos futbolistas en esta Liga Smartbank.
Zapater (4,5): Pone el 200% cada vez que entra. Es todo corazón y raza, pero el paso del tiempo se nota y el ejeano lo acusa. El capitán debería ser un futbolista para cerrar partidos, sin embargo, que tenga que hacer las veces de titular no habla nada bien del rendimiento de sus compañeros.
JavI Ros (4): Desafortunadamente no encuentra el nivel previo a su grave lesión desde la vuelta. Muestra actitud, pelea y se entrega cada vez que entra al campo, pero con lo que ha mostrado desde junio, se queda demasiado corto. Válido para aportar minutos desde el banquillo, aunque necesita mejorar notablemente para luchar por la titularidad.
Buyla (S/N): Tres partidos como titular y un par de apariciones como suplente no son suficientes para colocar una nota a un futbolista que no juega que desde noviembre únicamente ha disputado solo 33 minutos. Poco tiempo en el verde para valorarlo aunque eso sí, en lo visto ha aportado músculo y recorrido a la medular blanquilla.
Igbekeme (6): El problema no ha sido su nivel, si no que no es capaz de encadenar 10 partidos sin lesiones. El nigeriano desgraciadamente se ha vuelto de cristal y parece evidente que Torrecilla debe buscarle salida antes de que se quede sin mercado. Volvió en la jornada 8 y no lo hizo mal en los minutos que disputó, pero en la 14 se lesionó de nuevo muscularmente ante el Rayo Vallecano.
Adrián González (S/N): Un fichaje que hasta ahora ha sido cruz desde el día uno. Juzgado ya en pretemporada por su falta de movilidad y ritmo, se lesionó a las primeras de cambio, regresó y se volvió a romper para no volver a pisar el césped desde ese momento. Un gol y poquito más hasta ahora como jugador blanquillo del ex capitán del Málaga.
Extremos
Larrazabal (2): El ex del Athletic ha sido un desastre futbolístico desde su llegada. Mostró alguna mínima manera en los primeros días, sin embargo, ese poco se apagó y todo lo que intentaba acababa en error. Cedrún habló en Universo Romareda que no era el Gaizka que conocía. Quizá JIM hace que se reencuentre, pero hasta ahora, suspenso claro para el futbolista.
Zanimacchia (5): Aprobado por su buena segunda mitad frente al Lugo y buscar el desborde cada vez que entra al campo. El jugador cedido por la Juventus apenas ha tenido fortuna en su búsqueda de la portería rival, sin embargo, nunca deja de intentarlo y el último día sí le salieron las cosas. Luca no se esconde y ese es el primer paso para cambiar las cosas en el verde y crecer como futbolista.
Rai (S/N): Mostró maneras entrando desde el banquillo con Iván Martínez y eso le dio la oportunidad de inicio. Una opción que le llegó en Gijón, pero apenas produjo absolutamente nada el Real Zaragoza en ella y por ello tampoco el brasileño. En el único encuentro de JIM como entrenador, no jugó ningún minuto. En el cómputo general, apenas llega a 90 minutos en la temporada. Claramente insuficiente para colocar un número a su rendimiento.
Papu (1,5): Ni rastro de aquel georgiano que deslumbró con Natxo González. Era la enésima oportunidad concedida a Papu y la desperdició. Ha acabado marchando a Nicosia libre después de tratar de recuperarlo varias veces con una cesión incluida en Santander y al final darse por imposible. Recibe la peor nota del equipo por la alarmante falta de actitud mostrada.
Bermejo (6): El chico del cable lo tiene más desconectado que otra cosa. El ex del Celta ha ido de más a menos pasando de indiscutible a suplente claro. Muestra maneras y talento, pero pocas veces culmina lo que inicia. Un futbolista con talento, pero que desde la primera jornada se pierde por el camino en exceso.
Delanteros
Vuckic (4,5): El esloveno está decepcionando hasta el día de hoy. No ha gozado de todas las oportunidades esperadas, pero es innegable que el no perforar la portería a estas alturas es preocupante. Las cifras mostradas en Holanda están en las antípodas de las actuales.
Toro Fernández (2): El delantero uruguayo ha sido un desastre, aunque paradójicamente, JIM habla de que va a ser el mejor fichaje de enero. El ex de Peñarol está cruzado con el gol y eso que las ha tenido y muy claras. Su último partido muestra un rayo de luz, sin embargo, el resto de la temporada está al nivel de la altura del betún. Una muestra de ello es que está en todos los debates del peor fichaje del Real Zaragoza desde su último descenso.
Azón (8): El jovencísimo futbolista se ganó a la parroquia blanquilla en un partido para el recuerdo frente al Fuenlabrada. Lo pelea todo, gana más balones aéreos que pierde y tiene un hambre voraz de comerse el verde. Lleva muy poco tiempo en el fútbol profesional, pero cuesta creer que si las lesiones no lo paran, un futbolista con tanto corazón en el césped no vaya a llegar a vivir de este deporte.
Narváez (7): El colombiano es el máximo artillero blanquillo con cinco dianas. Pese a ello y porque su calidad es alta, se le debe exigir más incidencia en el juego y generar para los compañeros a través de los desmarques. Posee una capacidad grande para intervenir poco y ser decisivo, pero si da ese paso adelante comentado, puede ser un futbolista de primera sin dudarlo.