En una tarde fría en Terrassa, marcada por la inauguración de un remodelado Estadi Olímpic, el CD Teruel consiguió llevarse un meritorio punto que le permite sumar de nuevo, tal y como lo ha hecho en las últimas siete jornadas. Este resultado permite a los rojillos continuar afianzándose en la cúspide de la tabla.
Tomando el 1-4-4-2 como hoja de ruta, Víctor Bravo apostó por el mismo equipo que derrotó en Pinilla al CE Manresa con la inclusión de Fran Carmona como única novedad. El zaguero andaluz sustituyó a Carlos Javier en la alineación y fue uno de los nombres más destacados del encuentro. Por su parte, Jordi López, técnico del conjunto catalán, introdujo dos variaciones respecto a su último partido. Sergi Serrano y Álex Fernández volvían al once para aportar descaro y calidad, respectivamente, al juego de un Terrassa FC caracterizado por su sistema 1-5-2-3.
Desde el inicio, el cuadro egarense se mostró más que predispuesto a tener el control y a llevar el peso del partido. Era un día importante para la entidad, los de Jordi López lo sabían y querían estar a la altura, regalando un triunfo a los más de seis mil aficionados que asistieron al Estadi Olímpic. Pese a ello, lo cierto es que, desde el primer minuto hasta el último, se encontraron una y otra vez con un CD Teruel que dio una exhibición defensiva digna de mención. Los primeros acercamientos de los catalanes llevaron la firma de un activo David Jiménez por la banda derecha. Por su parte, el conjunto aragonés trató de conectar con su delantero referencia, Stephane Emaná, que se encontró algo incómodo debido a la exigencia que le proponían los centrales rivales.
Con el paso de los minutos, el Terrassa FC generaba cada vez más peligro con Aythami como protagonista. En el minuto 17, el canario trazó una diagonal desde la banda izquierda que culminó con un endiablado disparo que, afortunadamente para Taliby, no encontró portería. Posteriormente, Lucas Viña trató de incomodar a los hombres de Víctor Bravo con numerosos envíos desde el costado zurdo que Cabetas y Fran Carmona despejaron con firmeza. El partido de ambos centrales, al igual que el de todo el entramado defensivo aragonés, fue impecable. De hecho, al filo del descanso, el capitán sacó un pie milagroso que dejó con la miel en los labios a un Servetti que ya visionaba el gol.
En ataque, el CD Teruel no encontró el camino para llegar al arco de Marcos Pérez. La rocosa línea de cinco del conjunto egarense en defensa imposibilitó generar apenas ocasiones de verdadero peligro. Y es que, únicamente, un cabezazo de Guille Andrés puso en apuros al guardameta ex de la UE Costa Brava en el primer tiempo.
La segunda parte estuvo marcada por la incomodidad del Terrassa FC, provocada por el resultado y el gran partido a nivel defensivo que estaba firmando el cuadro turolense. Poco a poco, la ansiedad y el nerviosismo se fue apoderando de los pupilos de Jordi López, que no lograban poner a prueba a Taliby. Ante esa situación, lo cierto es que los de Víctor Bravo se estiraban cada vez más y empezaban a dominar algo más el encuentro.
Para erradicar esa buena reacción de los rojillos, el conjunto egarense dio entrada a dos extremos como Carlos Martínez y Jordi Cano, ex del filial de la SD Huesca. Pese a ello, los catalanes seguían chocándose repetidamente con una muralla vestida de equipo aragonés. Esa desesperación se tradujo en caídas inexplicables en el área en busca de penaltis inexistentes. La entrada de Luis Carbonell agitó en ataque al CD Teruel, aunque no lo suficiente como para poner el primero en el marcador.
La continuidad del 0-0 provocó que Víctor Bravo buscase potenciar aún más el eje defensivo con la entrada de Carlos Javier. De esta forma, con las previas entradas al campo de Marc Manchón y de Dani Villa, el técnico zaragozano cambió el 1-4-4-2 por el 1-5-4-1 con el objetivo de “liberar más” a Luis Carbonell, tal y como aseguró en la rueda de prensa al término del encuentro. Pese a ello, lo cierto es que la principal razón de ese cambio de sistema fue la necesidad de agarrar con todas las fuerzas un punto bañado en oro, teniendo en cuenta el contexto de éste.
Finalmente, el CD Teruel consiguió seguir sumando y salir vivo de un campo tan complicado como va a convertirse el Estadi Olímpic de Terrassa en las próximas fechas ligueras. Además, los aragoneses acumulan su décimo choque sin encajar, evidenciando su buena dinámica. Y es que, en esta categoría tan igualada, lo que te hace campeón es el no perder y el no encajar. Pues bien, parece que los rojillos lo han entendido a la perfección: finalizan la primera vuelta líderes con 36 puntos y con solamente once goles encajados. Estos datos son una radiografía de una temporada que, por el momento, está siendo ilusionante. Sin embargo, a la vuelta de la esquina espera un Lleida Esportiu que viene de empatar ante todo un RCD Espanyol B. Este próximo domingo, nueva final para la entidad aragonesa.
Ficha técnica:
Terrassa FC (1-5-2-3): Marcos Pérez; David Jiménez, Víctor Morales, Jaouad, Neeskens, Lucas Viña; Álex Fernández (Meshak, min. 69), Lledó; Sergi (Carlos Martínez, min. 58), Servetti y Aythami (Jordi Cano, min. 58).
Entrenador: Jordi López.
CD Teruel (1-4-4-2): Taliby; Víctor Sanchís, Edu Cabetas, Fran Carmona, Julen; David Aparicio, Tena, Borja Romero (Carlos Javier, min. 83), Lucho (Luis Carbonell, min. 63); Guille Andrés (Marc Manchón, min. 83) y Stephane Emaná (Dani Villa, min. 69).
Entrenador: Víctor Bravo.
Árbitro: Morilla Turrión.
Goles: no hubo.
