Perdió el Real Zaragoza un partido en el que fue por detrás de antes de empezar. Si sobre el papel Ramírez volvió a incurrir en los mismos errores, sobre el césped nunca hubo un equipo profesional. Al partido entró relajado, sin tensión competitiva y el Almería desde muy pronto se lo hizo pagar. Una carambola puso por delante al cuadro indálico nada más empezar, en una acción anticompetitiva que sirvió para refrendar una teoría: no hay razón que sostenga la titularidad de Femenías.
Sin intención en el juego, el Real Zaragoza sucumbió también en el resto de las facetas. Incapaz de encontrar el balón, el lenguaje gestual de todos fue el dibujo de un equipo muerto. Suárez, antes del primer cuarto de hora, puso el segundo tras una secuencia fatal que dejó muchas víctimas por el camino. En la foto de la desgracia apareció Clemente en primera plana, más pendiente de un saque de banda que no existió que de seguir la jugada; también Francho y Arriaga en un segundo.
El Real Zaragoza tampoco tuvo capacidad de reacción, rebeldía ante el desastre. De hecho, Édgar González, el central de su rival, fue el que le metió de nuevo en el partido. Fue en una jugada aislada, la primera en la que el Zaragoza encontró a Francho con libertad, cerca del área. El canterano sirvió un buen balón lateral, con tensión e intención, y Édgar se lo metió en su portería. Lo peor fue que el 2-1 ni siquiera espoleó al equipo, que se limitó a seguir abriendo su propia herida con un plan dramático, incomprensible a ojos de cualquiera que estuviese viendo el partido.
Antes del descanso hubo tiempo para el enésimo error individual. Esta vez le tocó a Tasende, que perdió un balón prohibido a un minuto del descanso en un tiempo que nunca se tuvo que jugar. Melamed se apuntó el tercero ante un portero fantasma.
El Real Zaragoza, muerto desde antes de salir
El inicio de la segunda fue la continuidad de la primera. Fiel a sus cinco defensas, Ramírez mantuvo la estructura, el guion de su partido. En su libreta no estaba alterarlo, ni siquiera con 3-1 en el marcador. El colmo llegó con Calero, que entró por Tasende en un cambio eminentemente defensivo que el partido no pedía. Consumado el desastre, Pubill lo sentenció con un cabezazo certero, sencillo ante la inoperancia de Jair y Clemente, que defendieron el envío lateral con la vista, en algo que ya es tendencia dentro de la plantilla.
Perdido el partido, el Zaragoza dejó también su dignidad en Almería. De allí se llevó un cartel, peligroso y real a partes iguales: es muy candidato al descenso a Primera Federación. Los duelos y las segundas jugadas fueron suficientes para saber que ahora mismo está en una categoría que no le pertenece. El carrusel de cambios mejoró ligeramente al Zaragoza, aunque también el Almería entendió que su partido en esos momentos pasaba por manejar los tiempos y jugar con madurez los minutos fríos que quedaban.
Bazdar culminó la tarde y un inicio dramático de 2025 con una expulsión infantil, innecesaria, en una jugada en la que llegó tarde. No protestó. Solo se limitó a pedir perdón rápidamente tras la acción, consciente del castigo que podía acarrear la jugada. En ese punto, el Zaragoza empezó a rezar por el final del partido. Carente de amor propio, alguno ni siquiera aguantó el chaparrón de los desplazados.
La derrota del Zaragoza en Almería origina un nuevo terremoto. Si a nivel clasificatorio puede ser una tragedia, a nivel deportivo acaba con la historia de Ramírez en el banquillo. Destituido en la sombra desde la semana pasada, el club utilizó el silencio para decidir y sin decir nada empezó a perder un partido que él nunca debió dirigir.
Ficha técnica
UD Almería (1-4-2-3-1): Maximiano; Pubill (Perovic, 86’), Édgar, Radovanovic, Bruno Langa; Lopy, Melero (Arribas, 77’); Puigmal (Pozo, 46’), Robertone (Selvi Clua, 66’), Melamed (Lázaro, 66’); Luis Suárez.
Real Zaragoza (1-5-3-2): Femenías; Luna (Liso, 60’), Vital, Jair, Clemente, Tasende (Calero, 46’); Francho, Arriaga, Moya (Guti, 60’); Dani Gómez, Soberón (Bazdar, 60’).
Tarjetas (Palencia Caballero): Amarilla a Lopy (2’) y Luna (44’). Roja a Bazdar (80’).
Goles: 1-0 Édgar (6’), 2-0 Luis Suárez, 2-1 Édgar (p.p.) (25’), 3-1 Melamed (45+4), 4-1 Pubill (53’).