HUESCA | La SD Huesca ha presentado hoy en el Ayuntamiento de la capital altoaragonesa el texto refundido requerido y que había levantado tanta polémica con el objetivo de que el estadio El Alcoraz esté en la más absoluta legalidad. El proyecto global unificado del estadio, que engloba todos los trabajos de reforma del mismo, ya está en poder de los técnicos, por lo que todo apunta a que no debería haber problemas para que la disputa del Huesca – Espanyol de este próximo domingo sea con público en la grada. Para que así sea, los técnicos municipales deben dar el visto bueno al informe refundido presentado por los rectores de la SD Huesca.
La alcaldesa de Huesca, Lorena Orduna, pidió que ese texto refundido estuviera en poder del consistorio oscense este lunes y el club ha respondido entregándolos en el plazo señalado. Y es que si la situación ya de por sí era necesaria, las declaraciones de Lorena Orduna, este sábado, en Zaragoza, en las que uso de manifiesto que el partido contra el Espanyol podría ser sin público, aceleró la entrega de la documentación para ajustarla al plazo solicitado. En esas declaraciones, Orduna reconoció que el club había mostrado su colaboración y también que el Huesca es importante para la ciudad.
El viernes estalló la bomba
La polémica se remonta a la última etapa de Luis Felipe (PSOE) como alcalde de la capital altoaragonesa. El entonces primer edil firmó un decreto once días antes de las elecciones municipales y autonómicas de mayo y se hizo firme porque el club siquiera recurrió en vía administrativa. Así las cosas, el cierre del estadio, en principio ordenado por el actual equipo de gobierno (PP), según el titular que lanzó El Periódico de Aragón, hubiera sido un importante golpe para las arcas del club y para el equipo ya que acarrearía sanciones en forma de puntos.
Una vez que se desató la marea llegó la matización. Fuentes municipales confirmaron que el cierre, “de momento», no se iba a producir; y que el encuentro entre el Huesca-Espanyol sería en El Alcoraz.