ZARAGOZA | El Real Zaragoza únicamente disputó una veintena de minutos en El Molinón y se va de la ciudad asturiana con una derrota por la mínima y con dos jugadores menos sobre el terreno de juego. Los de Víctor Fernández realizaron la actuación más pobre de la temporada, lastrada por las imprecisiones, la falta de competitividad y la superioridad numérica del rival.
POUSSIN (6): Casi un año después, el galo regresó a un estadio embrujado para él. Sin embargo, disipó todo resquicio de fantasma y volvió a ser una de las notas más positivas de los de Víctor Fernández al sostener al equipo cuando peor lo estaba pasando.
IVÁN CALERO (4): El que fuese futbolista del Cartagena no desentonó pero tampoco destacó. Correcto en labores defensivas pero improductivo en ataque, siendo la imprecisión el aspecto más destacable. Encuentro de luces y sombras el del ‘19’.
LLUÍS LÓPEZ (2): Al igual que su compañero en la zaga, realizó la actuación más pobre de la temporada. Poco contundente, descentrado y desquiciado en el tramo final del encuentro, vio la tarjeta roja directa en una acción infantil.
BERNARDO VITAL (4.5): Culminó la que probablemente sea la menos brillante de sus actuaciones con la camiseta del Real Zaragoza. Bloqueó y despejó el esférico en sendas ocasiones, pero estuvo algo descentrado en ciertas acciones.
CLEMENTE (1.5): El encuentro del ex del Racing de Ferrol fue una oda a la calamidad. Perdió un esférico, propiciando el tanto rival, y volvió a regalarlo en la segunda mitad para posteriormente ser expulsado. Encuentro para olvidar.
TONI MOYA(5.5): El ‘21’ sacó la batuta y dirigió a sus compañeros durante buena parte del encuentro. Ordenó, distribuyó y robó, aunque acusó cierta falta de precisión en determinados lances del juego. De más a menos.
FRANCHO (6): El centrocampista no se dejó ni un centímetro de El Molinón sin recorrer. Superó líneas, combinó y ayudó en situaciones defensivas. Junto con Poussin, el mejor del Real Zaragoza.
LISO (3.5): pese a que lo intentó de todas las formas posibles, no fue el día del extremo. Desquiciado en la izquierda, no culminó prácticamente ninguna acción de todas en las que participó.
AKEXTE (3): La primera titularidad del vasco no fue del todo halagüeña. Sin rastro de esa potente zurda en el costado derecho, cargó con la cartulina amarilla desde el ecuador de la primera mitad. Insuficiente carta de presentación.
BAZDAR (4): El serbio comenzó el encuentro en la línea del equipo: activo en la presión y muy móvil en el último tercio. En cambio, conforme corría el cronómetro su presencia se fue diluyendo hasta terminar siendo sustituido en el descanso.
MARÍ (3): Recibió y aguantó de espaldas de manera correcta, siendo esto quizás lo único que hizo a derechas. Durante varios tramos del partido se ubicó lejos de la portería, lo que lastró enormemente su producción ofensiva.
También jugaron
AZÓN (3): Ingresó en el terreno de juego al descanso y no logró aumentar la intensidad ofensiva. Lejos del área y poco efectivo en metros finales, no mejoró el rendimiento de sus compañeros.
SOBERÓN (3): Realizó una actuación muy similar a la de su compañero en el ataque. Se contagió de la dinámica del resto del equipo y no logró acercarse a la meta rival.
TASENDE (3.5): Fue el encargado de cubrir el flanco izquierdo tras la expulsión de Clemente, pero lo hizo sin ningún tipo de brillantez. Aunque estuvo impreciso en los centros laterales, aportó cierta profundidad al ataque zaragocista.
ADU ARES (S.C)
MARCOS LUNA (S.C)
Entrenador
Víctor Fernández (3): No puso en práctica aquel tópico que dice que “lo que funciona no se toca” y realizó hasta 3 variaciones con respecto al encuentro frente al Levante. Ninguna de las permutas terminó por funcionar y el equipo se apagó tras unos primeros minutos muy dinámicos y verticales. El partido se puso en contra muy pronto y la inferioridad en el número afectó a que ninguno de los cambios funcionase.
(*) Artículo escrito por Javier Aragón