El Real Zaragoza ya ha hecho los primeros movimientos en su parcela ofensiva por medio de Sabin Merino y Giuliano Simeone. El primero, que sale cedido, ha dejado un hueco en la zona atacante que ocupará el joven cedido por el Atlético. De esta forma, el Real Zaragoza cuenta a día de hoy con dos delanteros centros, ambos nacidos en el 2002.
La juventud tanto de Simeone como de Azón es uno de sus principales fuertes, pero también una de sus pegas. Hambre frente a inexperiencia. Sea como sea, esta es la delantera con la que el conjunto maño comenzará su pretemporada -con la participación añadida de Marcos Baselga-. Lo cierto es que pocos equipos, por no decir ninguno, cuentan con una dupla de delanteros tan joven. Es por ello que nos planteamos si el equipo necesitará de un tercer delantero.
La realidad de Simeone e Ivan azón es que ambos vienen de hacer grandes campañas y existen motivos para la ilusión. El argentino ha alcanazdo los 25 goles en la Tercera RFEF mientras que el canterano ha hecho 7 tantos en la Segunda División del fútbol profesional. Nada mal para dos chavales de 19 años. A pesar de las cifras ninguno de ellos es una apuesta segura de 20 goles por campaña, pero en esta categoría muy pocos pueden colgarse esa medalla. Uno de los que puede hacerlo es Rubén Castro, jugador con gran experiencia y cuyo salario escapa del presupuesto maño. Este es precisamente el perfil que nos hace plantearnos si el Real Zaragoza debe apostar por la juventud o tratar de ir a lo seguro.
Por otro lado, la plantilla tiene ya dos delanteros definidos a los que se suman otros jugadores como Juanjo Narváez, que puede desempañarse en la posición. Por ende, la llegada de un tercer delantero centro requeriría de una nueva salida y, aún así, supondría un exceso de futbolistas en la demarcación. En ese contexto de sobrepoblación, o bien Simeone o bien Azón serían los sacrificios más probables. Un escenario que no tendría mucha lógica siendo uno cedido y el otro un canterano con proyección.
Sí tendría sentido y mucho la contratación de un tercer delantero en un sistema con dos puntas aunque este no parece el preferido de Carcedo. Tal contexto sería idóneo para Simeone y Azón, teniendo la posibilidad de jugar juntos o acompañados de un perfil distinto a ellos. Porque ese es otro punto, la similitud entre el argentino y el zaragozano. Ambos disfrutan corriendo al espacio y tirando desmarques, ambos tienen capacidad para robar en campo contrario y , sobre todo, ambos viven de la garra. Dos perfiles muy semejantes que gustan y triunfan en La Romareda.
Con todo esto, podemos sacar algunas conclusiones. El Real Zaragoza realiza una apuesta curiosa al darle la oportunidad a un jugador joven y de un perfil similar a lo que ya tenía. De esta forma, lo más probable es que la progresión de alguno de los dos se vea algo perjudicada, más aún si llega un tercer ariete. La posibilidad de esta llegada obedece a la necesidad de un delantero con registros distintos a los de Simeone y Azón -véase por ejemplo un delantero más rematador que sirva como referencia-. Y es que, esta necesidad no se debe a que Azón o Simeone no vayan a triunfar, para nada, se debe simplemente a que todo equipo necesita tener opciones distintas, más aún en la delantera.
Como ya hemos comentado, el sistema que mejor se adaptaría a esta hipotética situación de tres delanteros, es la doble punta. Pero por el momento, al igual que todo lo demás, el sistema es una incógnita.