La Clínica Nasser nos propone este decálogo en forma de preguntas que tenemos que plantearnos para saber si estamos adecuadamente preparados para afrontar con garantías de salud una prueba de larga distancia por montaña.
Anota tu respuesta a medida que respondas afirmativa o negativamente. Al final de las mismas encontrarás la puntuación para conocer el grado de adaptación que tienes.
- ¿He llevado un entrenamiento planificado por un profesional cualificado de la preparación física?
- ¿He realizado una prueba de esfuerzo en los últimos 12 meses?
- ¿Hago estiramientos siempre al finalizar cada sesión?
- ¿Llevo el calzado e indumentaria adecuada para el tipo de prueba y la meteorología prevista?
- ¿Incluyo dos sesiones a la semana con trabajo de compensación lumbar y abdominal para reducir el riesgo de lesión?
- ¿Me han realizado un análisis de sangre y orina a lo largo de los últimos 6 meses y ha sido interpretado por un profesional?
- ¿He sido capaz de completar en una sesión de entrenamiento el 70% de la distancia de la prueba objetivo en los últimos 2 meses finalizando sin problemas musculares y/o articulares?
- ¿Me alimento e hidrato de la forma más adecuada y eficiente a lo largo de la prueba en función del desnivel y las condiciones meteorológicas?
- ¿Trabajo la fuerza compensatoria al menos una sesión a la semana para reducir el riesgo de lesión y mejorar el rendimiento en la prueba?
- ¿Dispongo de los recursos psicológicos necesarios para superar situaciones adversas durante el transcurso de la prueba?
Comprobación de puntuación:
9 a 10 puntos: estás perfectamente preparado.
7 a 8 puntos: podrías optimizar tu estado de entrenamiento.
5 a 6 puntos: deberías mejorar bastantes aspectos de tu preparación.
3 a 4 puntos: no deberías competir en larga distancia.
0 a 2 puntos: ¿haces actividad física alguna?