ZARAGOZA | Segunda derrota consecutiva del Real Zaragoza. El conjunto zaragocista comenzó la temporada enchufado y encadenando hasta cinco victorias consecutivas. Ante el Racing de Santander comenzaron tres jornadas en las que el equipo solo ha conseguido sumar un punto de nueve y ha encadenado dos derrotas consecutivas. La última esta tarde ante el Mirandés frente a su afición.
El Mirandés apenas generó ocasiones de peligro, pero la que tuvieron, la metieron entre los tres palos. «En una acción suelta se va el partido», ha defendido Fran Escribá en rueda de prensa. «Después de una derrota piensas en ganar rápidamente. Hicimos una gran segunda parte con méritos para no perder. Ellos no tiran a puerta. Defendimos bien, y nosotros buscamos portería. El equipo lo ha dado absolutamente todo».
El Real Zaragoza ha demostrado más durante los 90 minutos de encuentro, pero no ha sido suficiente ni siquiera para meter un gol. «En cualquier jornada se ve que está todo muy igualado. Los dos últimos partidos han podido acabar en empate».
El once inicial de esta tarde ha estado caracterizado por los cambios, dando oportunidades a los menos habituales como Sergi Enrich. Precisamente, el jugador se ha convertido en el protagonista del encuentro tras ser expulsado al filo del descanso. Tras ver la roja directa por una acción en medio campo, el Real Zaragoza ha tenido que enfrentarse a otros 45 minutos siendo menos. «Tiene una experiencia tremenda y es un jugador listo en el área. Confiábamos en estar más cerca del área y tener más movilidad. Está muy afectado. No tuvo intención de golpear ya que estaba disputando un balón. No puedo decir que no es expulsión, pero no hay intención. Son cosas que pasan», ha defendido el técnico.
También regresaba al once Lecoeuche tras su lesión en el partido ante el Cartagena. «Ha hecho un partido inteligente. No estaba para 90 minutos y ha elegido bien. Los laterales siempre nos han dado mucho. Estamos un poco cojos y recae en un juego más interior. Estamos condicionados por las bajas». A pesar de estas bajas, el técnico zaragocista ya ha advertido a sus jugadores: «Quien baje su rendimiento tendrá que dar más para seguir jugando. Si siempre juegan los mismos, trasladaría un mensaje muy malo al grupo».
El equipo apenas tendrá tiempo para descansar. El jueves viajará hasta Andorra con la intención de atravesar este bache. El domingo que viene, los zaragocistas se medirán ante el Alcorcón en La Romareda. Semana de exigente trabajo y de cambios asegurados por el poco descanso.