ZARAGOZA | Fran Escribá resumió la derrota del Real Zaragoza ante el Alcorcón. El técnico dijo que el resultado se explicó a través de dos errores graves, que fueron casi “goles en propia puerta” de su equipo. La responsabilidad del resultado tuvo mucho que ver con esos dos fallos individuales, en decisiones de juego que contradicen el plan tratado para el partido: “si habíamos insistido en algo era en que no nos jugáramos ningún balón por dentro”. Lo hizo el Zaragoza y perdió, con Gaëtan Poussin en el foco. “No ha estado afortunado”, resumió Escribá.
“El resultado afea un partido que no jugamos mal. En la primera parte generamos ocasiones. No estoy cabreado por eso, ni por los conceptos ni por el juego. La propuesta de inicio fue buena. Pero nos han penalizado mucho nuestros errores”. El Zaragoza completa así una semana dura, en la que acumuló dos derrotas y un triunfo. En el duelo ante el Alcorcón, la intervención del VAR fue decisiva. El técnico no dijo nada distinto a lo que ya ha dicho muchas veces. Habló de decisiones milimétricas y del parón que ofrece en las sensaciones y en el ritmo. Según Escribá, el VAR juega contra la naturaleza del fútbol: “Si el arbitraje está en los informáticos, estamos confundidos. Me dicen que es penalti, pero que hay fuera de juego por interferencia. El gol se acaba anulando por el número de bota de Iván Azón. 6 minutos de juego detenido rompen el ritmo de una forma tremenda. No hemos perdido por el VAR, pero estamos en manos de informáticos”.
La síntesis del partido se explica, según Escribá, a través de los errores que cometió el Zaragoza y los que no concedió el Alcorcón: “Hicimos una primera parte buena, dominamos y generamos ocasiones, llegamos con centros y tiros. Cometimos un error gravísimo y en la segunda estuvimos cerca hasta cometer el segundo. Levantarse de algo así es muy difícil”. El técnico eligió la sustitución de Mouriño en el descanso, al que veía “algo nervioso”. Defendió el cambio de piezas en una semana de tres partidos y dijo que el mayor de sus cabreos se explicaba por una razón sencilla: no pudieron darle una alegría a la afición en días señalados.
Escribá defendió que su equipo estará entre los ocho candidatos al playoff, a pesar de cerrar la peor semana del curso. El fútbol ofrecerá una nueva revancha en Gijón y el Zaragoza buscará cambiar el paso en El Molinón.