HUESCA | El Bada Huesca acaba de coger contra el EON Alicante el billete para la Final a 8 de la Copa del Rey que se disputará en Irún. Otro duelo dramático en el que ha tocado apretar dientes y sufrir de lo lindo. Ha ganado en la muerte súbita desde los 7 metros. Miguel Malo embocó y se celebró por todo lo alto. Tremendo. Al partido de los 60 minutos le ha sucedido una prórroga, una tanda desde los 7 metros finalizada en igualdad y todo para que se decidiera al acierto sobre el fallo. El capitán cerró la eliminatoria; el otro capitán, Dani Arguillas, paró en la jugada anterior.
Nolasco apostó de salida por jugadores menos habituales. Lo había dicho en la previa. Competir al máximo, sí, deseo de estar en Irún en la fase final de una competición que gusta, también; pero con la vista puesta donde están las habichuelas: en la ASOBAL. La próxima cita es Granollers y Benidorm también llama a la puerta.
Eon Alicante está también en su propia guerra. Quiere ser equipo ASOBAL la próxima campaña y está armado con jugadores de muchísima calidad que saben lo que es jugar en la elite del balonmano español. Además, el próximo miércoles tiene un partido directo por ese objetivo al jugar contra el Caserío Ciudad Real. Los dos están en cosas importantes y ninguno ha ahorrado esfuerzos.
El siete altoaragonés impuso su ritmo y con el 6-12 en el electrónico a los 15 minutos de juego dejaba el sello de su calidad sobre la pista. El error fue mayúsculo. Se atascó para ver cómo el rival le endosaba un parcial 6-0, que se escribe pronto, y que arruinaba cualquier idea de que el partido iba a ser plácido. Latorre, técnico del Eon, desplegó todo tipo de pizarra para enmarañar el juego del Bada Huesca; en defensa y en ataque. Pasó del 6:0 al 5:1, de atacar con 6 a hacerlo con 7.
Con esas variantes, la sensación es que el Bada se atascaba más de lo previsto y Nolasco tuvo que echar mano de su guardia de corps donde prevalece Borragán. Su zurda es poderosa, su lanzamiento de 7 metros una garantía. Con todo, el final del primer acto fue 17-19.
Si el parcial de 6-0 en la primera parte, otro tanto sucedió con el 4-1 del segundo. Cuando Eon Alicante se puso por delante en el electrónico hubo que tirar otra vez del pundonor y la individualidad para evitar la eliminatoria. En el minuto 41 se habían marcado 51 goles (25-26) en el electrónico para significar lo que era el partido y eso que el portero local, Agustín Forlino era un espectáculo sacando buenas bolas.
Al término del tiempo reglamentario volvió a resurgir Dani Arguillas para frenar a Torriko un 7 metros y abrir la puerta a la prórroga. El capitán entró en el segundo acto por Gabor Decsi. No fue el mejor partido de Arguillas, pero sacó bolas tremendas. Al final es lo que importa. En la lotería de los penaltis, el Bada Huesca doblegó al Eon Alicante.
La lectura de la eliminatoria es muy positiva para un Bada que volvió a ganar, que coge billete para Irún que se sobrepuso a jugar la prórroga sin Borragán al ser expulsado a cuatros segundos del final del tiempo reglamentario y que en el deporte, tan importante como saber jugar es tener confianza de que vas a ganar. Y para la permanencia en la ASOBAL esta victoria es oro puro.