El Casademont Zaragoza acaba de perder por 90-92 ante el Joventut de Badalona. El partido comenzó con equilibro entre la escuadra rojilla y la verdinegra. Klemen Prepelic empezaba a mostrar esa metralleta que atesora como brazo con 9 puntos y Seeley (mismo número de tantos), lideraba a Casademont Zaragoza.
Primeras ventajas verdinegras
Eso sí, dentro de la igualdad, eran los de Carles Durán los que se llevaban la primera batalla, 19-24 al término del primer parcial. El segundo cuarto comenzó con la máxima del partido para Joventut (+7), sin embargo, no duró especialmente gracias a la imponente reacción de los rojillos. Defensa, transición, talento y Carlos Alocén, las recetas para llevarla a cabo hasta el 31-31.
Prepelic no bajaba su listón con un triplazo desde su casa y punteado. De nuevo, respuesta del equipo de Fisac con una jugada de equipo que culminó en triple Alocén.
Por primera vez desde el 4-0 se colocaba por delante el Casademont. No duró mucho, de nuevo, otro triple de un desatado Prepelic iniciaba un parcial de 7-0 que colocaba +6 al conjunto badaloní. Radovic lo cortaba desde el 4,60, sin embargo, Arturs Zagars (puro talento checo de la generación de Alocén), no se cortaba ni con un cristal. Anotaba un triplazo que volvía a dejar la distancia en siete, y es precisamente con este 40-47 con el que se llegaba al descanso en Zaragoza.
Casademont Zaragoza se agarra en el tercer cuarto
A la vuelta de vestuarios, Casademont se agarraba al partido y a base de intensidad y defensa lograba apretar y de que manera el choque colocándose a dos. Brussino y Barreiro le daban la vuelta con dos triples. Omic y Morgan lo volvían a igualar. 58-58 a 2:52 del final del tercer periodo. El desenlace del cuarto fue para Joventut. Los catalanes consiguieron llevar el partido al terreno en el que mejor estaban y obtuvieron así la máxima del encuentro. 61-69, tocaba remontar.
Benzing arrancaba el definitivo parcial con triple, pero Zagars y Omic replicaban con fuerza. Seeley convertía un 2+1. Sin embargo, nuevamente el pívot esloveno sumaba tras rebote, sin duda, el jugador interior que más le costó parar al equipo zaragozano.
Cuando más difícil estaba la empresa, Carlos Alocén cogió el timón con dos grandes penetraciones. Unidas a una canasta tras rebote de Justiz colocaban a Casademont ligeramente por encima. Reaccionaban los verdinegros alcanzando cuatro de ventaja con un triplazo de López-Arostegui que volvía a voltear el choque, pero este Casademont vuelve una y otra vez y lo hizo de nuevo para colocarse uno por encima con un triple de Alocén.
Una falta en ataque inexplicable de Justiz y la siguiente mandaron al banquillo al cubano ante el cabreo de la grada que por otra parte, supo ovacionar como merece el partido y el esfuerzo del interior rojillo. Así pues, atacaba Casademont con 90-90, no entró el triple de Seeley, y después, falta señalada en la penetración sobre Aróstegui que anotaba los dos. Con menos de seis segundos, Seeley penetraba, era objeto de falta, fallaba el primero, tiraba el segundo a fallar, aparecía Radovic que recibía la falta. Sin embargo, no conseguía anotar tampoco y el segundo a fallar, el palmeo de Hlinasson, se marchó. No pudo ser.