El Casademont Zaragoza se mide a Valencia Basket este domingo a partir de las 17.00 horas. 6-2 es el balance de los aragoneses y 3-5 el de los taronjas. Una situación irreal, porque, como señala el técnico Porfirio Fisac, “los equipos de Ponsarnau son máquinas en el momento que cogen el rodaje”. “Jugar doble competición lo pueden estar notando. Sobre todo, al estar en Euroliga”, afirma.
Por encima de todo, el segoviano pone el centro de atención en la “humildad” que debe desprender el club. “Jugamos contra un Euroliga, llevo vendiendo un año y medio una cosa tan importante que se llama humildad. La clasificación no da el grado de potencia de un club. Lo da tu confección de plantilla, la idea de club, como sea tu afición o los periodistas que cubren al equipo. Para mí es muy importante la humildad y cualquier crecimiento debe partir del respeto, la generosidad y el conocimiento. Soy castellano y es algo que os quiero dejar: creerse uno más de lo que es, en el deporte profesional, significa fracaso” asevera.
Este domingo podrá debutar el último fichaje, Dylan Ennis. Un jugador que viene “ilusionadísimo”. “Vosotros lo conocéis casi mejor que yo. Viene con una ilusión desbordante y vamos a ver cómo está a nivel físico. El club ya lo conoce y él está con ganas”, insiste.
Fisac analiza a Valencia
Para este encuentro, Fisac ha confirmado la baja de Rodrigo San Miguel, quien todavía no se ha recuperado de sus problemas en el costado. También ha valorado a la plantilla rival. “Les falta Van Rossom, pero con dos jugadores de la selección e incluso uno de ellos campeón del mundo. Lloyd, jugador NBA, anotador; Sastre, Abalde, Doornekamp o la veteranía y calidad de San Emeterio”, subraya.
“Por dentro, un jugador al que quiero y valoro muchísimo por su energía y esfuerzo como Ndour. Disponen de jugadores versátiles con muchos recursos y capacidades véase Dubljevic, Labeyrie o Tobey. En definitiva, un equipo muy potente, aunque por mucho que sea Euroliga y fuera de casa, no podemos entregarnos en ningún momento. Vamos a por la victoria”, dice constatando la competitividad del equipo.
“Todos los días amanece y no podemos pensar en lo que ya hemos hecho. Vengamos de ganar o perder. Estamos obligados como mínimo a demostrar trabajo y esfuerzo. Queremos ser mejor cada día. Sabemos que para ganar fuera necesitamos un grado de acierto alto y que nuestra defensa nos permita correr en varias opciones”, ha concluido.