La SD Huesca volvió a caer en Balaídos y se aleja 3 puntos más del Rayo Vallecano y el resto de equipos en la lucha por la permanencia. De nuevo, el equipo comenzó como frente al Levante y plantó cara, sin embargo, la efectividad de los locales ha sido el factor determinante en el resultado, según Francisco. “Hasta el minuto 70 el equipo ha estado cerca. La primera media hora el equipo ha sido muy superior“, ha afirmado. Pese a ello, tras las oportunidades desaprovechadas llegó el gol del Celta, punto a partir del cual los locales han sabido manejar el partido como querían, buscando sentenciar a la contra, como ha acabado ocurriendo.
El partido ha tenido un nombre propio para Francisco y ese es el de Iago Aspas. El delantero internacional español no ha perdonado a la SD Huesca y ha mandado de vacío al cuadro azulgrana de vuelta a casa. El técnico almeriense ha destacado su importancia en el partido, teniendo en cuenta cómo el Celta ha sufrido en el inicio, siendo pitado incluso por su público durante los primeros tramos del encuentro.
Continuando con su lectura del encuentro, el preparador azulgrana ha vuelto a insistir en las oportunidades generadas una semana más. “La imagen es buena pero no nos sirve“, ha asegurado. No ha querido olvidarse tampoco de otra de las asignaturas pendientes de los suyos como es la contundencia en las áreas. Otra cuestión que ha podido afectar, según Francisco, sobre todo en los últimos minutos, ha sido el estado anímico.
Después de esta nueva derrota, la SD Huesca ya tiene en el horizonte el partido frente al Real Madrid del próximo domingo, aunque Francisco no quiere mirar más allá del día a día. “Lo primordial es el entrenamiento de mañana”, ha añadido. Y a todos los problemas después de volver a caer, se suman las lesiones. Akapo ha tenido que retirarse después de la jugada del segundo gol por un pinchazo. Musto, que ha sido sustituido en el descanso, estaba afectado por un dolor de espalda, tal como ha informado el propio técnico.
Vuelta a la línea de 4 defensas
Francisco ha repetido el mismo once que frente al Levante en casa, con línea de 4 atrás. Para el entrenador del club altoaragonés, la vuelta a este sistema tenía como objetivo dotar de mayor verticalidad al equipo sobre el césped. Algo que, según ha afirmado, dio buenos resultados la pasada jornada y los estaba dando hoy, hasta el primer gol local.