La derrota en el choque del pasado lunes ante el Athletic Club de Bilbao supuso el fin de la mejor racha del Huesca en lo que llevamos de campaña. Una buena dinámica que comenzó en la jornada 21 en San Sebastián. Los azulgranas consiguieron rascar un punto en el siempre complicado estadio de Anoeta. Desde entonces, los de Francisco no saboreaban la derrota.
Con las victorias ante Real Valladolid y Girona, se enlazaron dos partidos consecutivos logrando los tres puntos. Un hecho sin precedentes en el debut del Huesca en la máxima categoría del fútbol español. La entidad altoaragonesa soñaba con vencer al Athletic, lo que hubiera significado situarse a tan solo tres puntos de la salvación.
5 puntos recortados en un mes
No hay que caer en el pesimismo. Hace un mes el equipo estaba hundido a once puntos de la permanencia. Jugando bien, pero sin conseguir los resultados esperados. Ahora, las arcas azulgrana se han llenado con 7 de los últimos 15 puntos en juego y de mucha moral para afrontar lo que queda de campeonato. El objetivo sigue estando muy complicado, pero la realidad es que la escalada del conjunto de Francisco, ha sido esperanzadora.
Por lo tanto, a día de hoy, la salvación queda a 6 puntos para el Huesca. Dos victorias suponen dejar atrás los puestos de descenso, frecuentados por los azulgrana desde la jornada 6. Restan muchos partidos pero los disputados en El Alcoraz deben mirarse con el único objetivo de no permitir que nadie puntúe. Ahora, y tras un calendario ante equipos de la zona media baja, el conjunto oscense deberá afrontar tras el partido del viernes en Cornellá, un calendario plagado de equipos de la zona alta, entre ellos las visitas a Getafe o al Santiago Bernabéu.