Los de Nolasco se vuelven de vacío de Cangas tras una horrible primera parte que condicionó el choque.
Foto: Balonmano CangasIncreíblemente, el casillero del Bada Huesca sigue a cero tras dos jornadas de la Liga Asobal. En O Gatañal, con una calor y humedad asfixiantes para la práctica del deporte, los oscenses arrancaron muy fallones y eso les condicionó sobre manera.
Para el minuto 5, los gallegos dominaban (6-2) y Bada Huesca acumulaba bastantes errores en ataque, que condicionaron la primera mitad. Con un marcador adverso, y sin saber como frenar a David García y Suso Soliño, no tardó en llegar la máxima diferencia en el marcador, (10-4), y aunque hubo una tímida reacción visitante (10-6), la ventaja de 6 goles tardó poco en dejarle claro al Bada Huesca que o se ponía las pilas o se le iba el partido.
El (16-10) con el que se llegó al descanso, indicaba claramente que en la faceta ofensiva se habían cometido muchos errores, y que en defensa las ayudas no eran suficientes.
La diferencia bajo los palos también era reflejo de dos situaciones muy distintas, cosa en la que Bada Huesca, también reaccionó tarde por lo visto en los segundos 30 minutos.
El orgullo, la casta y la ambición propiciaron una tímida reacción en el inicio tras el receso (16-12), pero como pasara en la primera parte, fue imposible acercarse en los primeros compases del segundo acto. Apretando los dientes en defensa, con el paso de los minutos Bada Huesca consiguió acercarse, (20-17), y con un esperanzador (22-19), Toño Cartón tuvo un 7 metros para acercar al equipo que iba a jugar en superioridad. El asturiano no tuvo la tarde desde la línea, (0 de 2), y un gol de Soliño tras el fallo casi acabó de sentenciar un choque que los oscenses maquillaron al final, pues nunca bajaron los brazos.
¿Qué habría pasado si Pablo Hernández hubiera estado en portería más minutos? ¿Qué hubiera sucedido si se hubiera ganado alguna de las superioridades que no consiguieron ganar los de Nolasco?
Nadie puede saberlo, pero son otras pequeñas piedras en un camino que se le puso muy difícil a los oscenses desde el arranque.
Inicio inesperado para un equipo, que sabe donde y porqué falla, y que a buen seguro, ante Ciudad Encantada, subsanarán para sumar la primera victoria en el casillero oscense.