La portería del Real Zaragoza ha sido hasta el momento uno de los principales focos en este marcado. A la marcha de Carlos Azón y los rumores en torno a la continuidad de Álvaro Ratón se une ahora la llegada de Gaizka Campos.
El guardameta recala en la capital aragonesa tras un breve paso por el filial del Celta, donde ha sido uno de los nombres destacados de la Primera RFEF. Nacido en Barakaldo, Gaizka Campos disputa 10 partidos con el equipo de su municipio en Segunda B con tan solo 19 años. Tras esta temporada, llega al Numancia B, donde incluso llega a debutar con el primer equipo (entonces en Segunda). Los méritos en el conjunto numantino le hacen llegar al Real Valladolid Promesas, donde juega un total de 24 partidos en Segunda B. De ahí se marcha al filial del Celta para consagrarse como uno de los porteros de la categoría.
Su buen hacer en la campaña pasada así como su edad -25 años- han llevado al Real Zaragoza a fijarse en Gaizka Campos, el segundo fichaje en este mercado de verano. De esta manera se abre un abanico de opciones bajo palos. Por un lado, Álvaro Ratón sigue siendo jugador del Real Zaragoza y su continuidad significaría, presumidamente, ser el tercer portero de la plantilla. Tal escenario cerraría las puertas del primer equipo a Guillermo Acín, que estado presente en muchas de las convocatorias aunque no ha llegado a tener minutos.
Por otro lado, la llegada de Gaizka Campos no se entiende como la de un simple portero suplente, sino como un guardameta que pueda disputar el puesto a un más que asentado Cristian. El nivel del argentino sigue siendo sobresaliente para la categoría pero el Real Zaragoza debe pensar en futuro. El tiempo no perdona. Así pues, Campos tendrá por delante un reto más que exigente si quiere hacerse con la portería de la vieja Romareda. Un reto que venía siendo necesario al no existir en los últimos años el más mínimo debate en la meta zaragocista. La competencia siempre es buena.
El Real Zaragoza ha tenido por mucho tiempo un claro defensor de La Puerta del Carmen, pero se le debía encontrar un sustituto a futuro. Quién sabe si incluso un competidor. Para eso llega Gaizka Campos, un fichaje que ha pasado por debajo del rádar pero que puede resultar clave en los tiempos próximos. Los relevos también pueden ser buenos.