Apenas un mes después de su marcha, Álex Gallar volverá a pisar El Alcoraz en el choque entre Huesca y Girona. En esta ocasión lo hará como visitante, vistiendo la elástica del cuadro gerundense. El jugador catalán se reencontrará con el equipo en el que hizo historia, siendo pieza clave en el tramo final de la temporada del ascenso a LaLiga Santander. Un aliciente más para un partido entre dos equipos llamados a estar arriba, con el Huesca buscando su segunda victoria consecutiva.
El pasado 21 de agosto se confirmaba la salida de Álex Gallar de la SD Huesca rumbo al Girona por una cantidad cercana al millón y medio de euros más variables. Se ponía de este mundo punto y final a la vinculación entre el extremo con la entidad altoaragonesa. Dos años resumidos en 64 partidos, 12 goles y 8 asistencias en el ámbito estadístico.
Más allá de datos, lo que queda en el recuerdo de su paso por el club es su papel en el final de la temporada del ascenso y su deslumbrante inicio en la máxima categoría. Un recuerdo materializado en sus goles en Lugo y Eibar. Sin embargo, al igual que para el resto del equipo, el prometedor inicio en primera se acabó torciendo para Gallar y pasó a un papel secundario en el que no acabó de llegar a su mejor versión, ni con Leo Franco, ni con Francisco Rodríguez en los banquillos.
Durante la temporada pasada en LaLiga Santander, el ya ex jugador de la SD Huesca disputó casi 1000 minutos, repartidos en 25 partidos, consiguiendo 4 goles y 1 asistencia. Antes de cerrar su salida, un gol suyo ante Las Palmas en el debut liguero dio al Huesca sus primeros tres puntos en su vuelta a la categoría de plata.
Gallar y el Girona, inicio irregular
En lo que va de temporada, Álex Gallar acumula 335 minutos y es uno de los efectivos claves para Unzué en este inicio de curso. Ha participado en 5 encuentros, 4 de ellos como titular. Eso sí, el Girona está teniendo un arranque de curso irregular con 3 victorias, 3 derrotas y 1 empate, siendo un equipo más sólido en Montilivi que fuera de casa.
El ex azulgrana contribuyó con una asistencia a la victoria por 3-1 al Rayo Vallecano, la más abultada de los rojiblancos hasta la fecha. En el último partido jugó los 90 minutos en la victoria por la mínima del Girona ante la UD Las Palmas.