El Bada Huesca se mide esta tarde (18.30) a un Benidorm en el pabellón de la localidad alicantina cuajado de jugadores que defendieron el escudo del siete oscense.
Segundo partido del año y primera necesidad no solo de ganar sino de hacerlo bien tras el caos de la pasada jornada contra Cuenca. Bada Huesca viajó ayer por la tarde a Benidorm. Allí le espera un equipo con plantilla amplia y de buenos jugadores que sigue sin encontrar con la clave que lo saque del pozo de la clasificación. Nadie sabe el porqué, pero Benidorm cierra la clasificación con jugadores de calidad contrastada. Y nadie duda de que vayan a despertar.
La derrota contra Cuenca está analizada desde todos los lados. La máxima es que se gestó por el desacierto en el lanzamiento, y en posiciones de 6 metros. Corregir ese error será la primera premisa para traerse los dos puntos de Alicante.
Quedar entre los ocho primeros de la Asobal es el objetivo. Y todo está tan apretado en la clasificación que igual que se toca con los dedos la octava plaza, un par de traspiés te bajan del escalón y hay que reorientar todo.
Sebastián Fernández y David Monjo arbitrarán el partido que arranca a las 18.30 en el Palau d’Esports I’lla de Benidorm. Nolasco tiene a casi toda la plantilla en sus condiciones. El único que se quedó en Huesca fue Jorge Garzo, con un problema en los tendones rotulianos, y Mikel Mugerza y Bonanno han tenido algunas molestias físicas, pero estarán.
Nolasco subraya de Benidorm que “jugador por jugador tiene muchísima calidad. Ha perdido muchos partidos de uno, de dos o de tres y ha incorporado a Corzo, uno de los máximos goleadores de la temporada pasada que vuelve después de un contrato jugoso en Qatar. Es un equipo muy peligroso y a nivel defensivo ya los conocemos. Tienen a Eloy y Chernov en el centro y los otros exHuesca –Grau, Cuartero y Esteban- son jugadores con una capacidad defensiva tremenda”.