La diabólica espiral en la que se encuentra sumido el Real Zaragoza, tanto en el plano deportivo como económico, le lleva a una frenética actividad en los despachos. Si se necesita que los jugadores hagan gol, también se trabaja en la sentina del club para inyectar dinero a su economía. E incluso para cambiar su rumbo. Dentro de los movimientos y negociaciones abiertas para adquirir acciones del Real Zaragoza, el empresario Gerardo Sánchez Navarro ha puesto negro sobre blanco en relación a las informaciones que le vinculan con la compra de acciones junto a Juan Martínez.
En una nota de prensa emitida por el abogado José Luis Calonge, el empresario zaragozano reconoce que, si bien es cierto que un grupo de personas “de reconocida solvencia económica” han mostrado un “verdadero” interés en la adquisición del Zaragoza, tras varias reuniones con “un miembro del Consejo de Administración” su propuesta recibió el rechazo “de forma incomprensible” su propuesta.
La propuesta era la adquisición del “paquete mayoritario” de las acciones. Y lo iba a ser con capital totalmente aragonés y formado únicamente por socios zaragozanos. En la nota de prensa, que firman Gerardo Sánchez y Juan Navarro, no esconden su “desilusión” porque su intención era mejorar el trabajo desarrollado por el actual Consejo de Administración. De este precisan que tras ocho años, “hemos observado que su modelo de gestión no ha sido suficiente para conducir al Real Zaragoza donde le corresponde por historia y afición”.
En la nota de prensa, afirman, que el grupo empresarial que propuso la adquisición de la mayor parte del accionariado tiene claro que el Real Zaragoza del siglo XXI tiene que estar “siempre alejado de intereses especulativos” y recalcan que lo único que le ha acercado a la propiedad es “el sentimiento, la confianza y la absoluta seguridad de hacer un club mejor”.
El grupo empresarial, pese a todo, espera de la actual propiedad del Real Zaragoza “un cambio de postura” para hacer un club diferente y, a su juicio, “sea un orgullo de todos”.