¿La buena visión es suficiente? Hago deporte y no veo en profundidad.
La información que obtenemos a través de los sentidos completa nuestra acción de vivir, comemos, dormimos, respiramos, trabajamos… hacemos muchas tareas a lo largo de nuestro día, y ¿qué sentido está más activo? Junto al tacto, la vista es el sentido que, a lo largo de todo el día se encuentra en funcionamiento. Normalmente la habilidad que más se conoce es la agudeza visual, y creemos que con ella basta para tener una visión definida y completa, pero… ¿es suficiente?
En el deporte, ponemos al límite nuestras habilidades, como la respiración, la musculatura, nuestra motivación, nuestro cansancio, etc. ¿Y la visión? También trabajamos con ella, en según qué deportes incluso debemos tener una buena visión para poder ver correctamente un balón, seguirlo, saber a qué velocidad se acerca, cuándo cogerlo, dónde lo tengo que llevar, qué rivales tengo a mi alrededor, etc.
En un gran deportista se puede intuir que estas habilidades pueden llevar consigo unas características especiales, el entrenamiento que se realiza de alto nivel implica una serie de ejercicios mecánicos que, en muchas ocasiones, también se entrena la visión, el tiempo de reacción, la coordinación ojo-mano, la binocularidad y que por lo tanto estos deportistas deberían tener un alto rendimiento visual.
¿Qué habilidades son necesarias para poder tener un alto rendimiento deportivo?
- Agudeza visual mínima para ese deporte. No es lo mismo un deportista que realice un deporte que tenga menos exigencias visuales como otro que sí, como, por ejemplo, el tenis o el pádel. Un deporte en el que sería necesario contar con una buena agudeza visual sería el tiro con arco o el tiro al plato.
- Buena motilidad ocular (coordinación de los ojos para realizar seguimientos de forma precisa).
- Dentro de la motilidad ocular contamos con tres habilidades: fijación (el punto que se mire sea preciso y recaiga sobre el centro de la fóvea), los seguimientos (la coordinación suave de los ojos para realizar un barrido), y los sacádicos (saltos de fijación de un punto a otro).
- Un ejemplo: la fijación es la estabilidad de los ojos al observar un punto pequeño, en el caso de los seguimientos sería cuando seguimos la pelota en un partido de tenis y los sacádicos por ejemplo sería cuando estamos contabilizando los jugadores de un campo de fútbol.
- Buena binocularidad. Está demostrado que aproximadamente un 6/7 % de la población tiene dificultades binoculares, muchas de ellas sintomáticas, y podrían mejorar con ejercicios o entrenamiento visual. Los deportes que se verían implicados son aquellos en los que se tiene que golpear una pelota y en los que se tiene que observar un objeto que se acerca y se aleja (fútbol, béisbol, tenis, (béisbol, basket, tenis, pádel, boxeo…)
- La estereopsis. O más conocida como la visión en 3D. Esta habilidad nos permite diferenciar la profundidad del campo, la posición de un balón, y sobre todo, nos permite calcular distancias. Este factor es muy importante para casi todos los deportes y más sobre deportes de velocidad como el esquí.
- La sensibilidad al contraste. Factor que nos permite distinguir los contornos de los objetos y también en diferentes condiciones de luz. Existen partidos de fútbol en los que está atardeciendo y en la mitad del campo existe sombra, por lo que esta habilidad entraría en juego en esas condiciones.
- Existen otras habilidades como son la coordinación ojo-manual, la visión periférica, la agudeza visual dinámica, etc.
Estos factores podrían entrenarse mediante ejercicios combinados con estos ejercicios mecánicos y por lo tanto mejorar aspectos que normalmente no se entrenan.
Debemos tener en cuenta que el 80% de la información que entra en nuestro cerebro viene a través de nuestro sentido de la vista y debemos cuidar nuestros ojos, por lo que, debemos comunicar al especialista de la visión el deporte que practicamos para poder estudiar todas aquellas habilidades visuales que, en otros casos no se valorarían. Para esta valoración tan precisa se cuentan con unos aparatos de medición específicos y debe medirse con periodicidad para observar cambios en la evolución del deportista, además, con una buena prevención, se pueden evitar accidentes oculares.
Los accidentes y contusiones son muy habituales en deportes y juegos con pelota y tienen un riesgo especial, así pues, unas gafas de protección serían muy recomendables.
En el caso del esquí, una buena protección solar en las gafas con lentes espejadas y oscuras para días soleados, también evitan queratitis e inflamaciones que no deberían de aparecer en condiciones normales. También son recomendadas en el running, ciclismo, y otros deportes de velocidad, en los que la arenilla de los coches, o de otro deportista puede entrar en contacto con la superficie ocular.
Consejos para una buena visión en el deporte
Hacer descansos en la lectura. Se recomienda la regla 20-20-20 (por cada 20 minutos de lectura, 20 segundos mirando a más de 20 pies o 6 metros).
- Hacer deporte al aire libre favorece el desarrollo visual normal y previene la miopía.
- Tener una buena protección visual en los deportes para evitar lesiones oculares
- Hacer revisiones oftalmológicas periódicas para valorar el estado de salud visual y en el óptico optometrista para medir todas las habilidades visuales tan específicas para los deportes.
Carmen Bilbao Porta, Óptico optometrista, Msc, phd. Col. 19734