ZARAGOZA | La espera ha sido larga, pero Helena Oma vuelve a sentirse jugadora con todas las letras. Después de más de un año de lesión, la alero ha vuelto a brillar sobre la pista y lo demostró en su último partido, ante Araski, (85-60) donde firmó 10 puntos, 3 rebotes y 5 asistencias para 14 créditos. Ahora, con el duelo ante el Joventut de Badalona (miércoles, 20:00 horas) a la vista, Oma se muestra ambiciosa: “Aún está por llegar mi mejor versión, así que a seguir trabajando y a coger ritmo”.
El equipo afronta una fase crucial de la temporada, con la mirada puesta en los ‘playoffs’ por el título y en una Copa de la Reina con acento maño, pues se disputará en Zaragoza del 20 al 23 de marzo. Para Oma, el objetivo está claro: “Tenemos que encontrar nuestro ADN, que las nuevas incorporaciones se adapten y yo, personalmente, seguir cogiendo ritmo para ayudar al equipo”.
La exigencia de la doble competición ha pasado factura, pero,, ahora ya fuera de la Euroliga, el equipo afronta este tramo con confianza y ambición. También con más descanso y tiempo para preparar cada choque a conciencia. “Estos últimos meses han sido muy físicos, pero siempre intentamos dar lo mejor. Ahora tenemos un margen de semanas para recuperar sensaciones y preparar lo que viene”, destaca la jugadora. El objetivo de acabar en las cinco primeras plazas, o más, sigue muy presente en el vestuario. Cuanto mejor sea la posición, mayor ventaja en los playoffs. “Vamos a ir con todo, no solo contra el Joventut, sino en todos los partidos que quedan. Queremos llegar al final en nuestro mejor nivel”, recalca Oma.
La Copa de la Reina, una ilusión especial
La Copa de la Reina, que se disputará en Zaragoza, es uno de los retos que más motiva al equipo. No en vano, el Casademont ganó la edición de 2023 -con asistencia histórica (10.800 espectadores) y MVP de la propia catalana- y quedó subcampeón de la pasada ante Valencia. Mínimo hay duende. “Desde el momento en que supimos que la jugaríamos en casa, la hemos tenido en mente. No solo por jugar en Zaragoza, sino por la ilusión que genera”, confiesa Oma.
Para llegar en las mejores condiciones, el equipo trabaja en la gestión de minutos y en la adaptación de las nuevas incorporaciones, como son Shante Evans y Brianna Fraser. “Nos ilusiona ver la plantilla que tenemos ahora mismo. Cada una tiene que encontrar su momento y sus minutos para alcanzar el máximo nivel como equipo”. Sobre Fraser, Oma solo tiene buenas palabras: “Es una grandísima jugadora y mejor persona. Su química con el equipo nos vendrá muy bien”.
Con el equipo consolidado en la cuarta posición y con la mirada puesta en los objetivos más ambiciosos, Helena Oma afronta esta nueva etapa con ilusión y determinación. Su regreso es una gran noticia para el equipo, que ya sueña con hacer historia en la Copa y los playoffs.