HUESCA | Antonio Hidalgo ha protagonizado su semana más mediática desde que decidió ser entrenador. El pasado domingo con la destitución de Pezzolano su nombre salió como candidato al banquillo del Real Valladolid. Fue Cazurreando en su cuenta de Twitter el que activó las alarmas en El Alcoraz. Hubo contactos e incluso negociaciones entre el equipo pucelano y el entorno del entrenador. Sin embargo, el Huesca manejaba la situación con cierta tranquilidad, ya que ellos tenían la llave a su salida, que era la cesión de derechos del catalán.
Sin el permiso del club altoaragonés no había salida, por mucho que hubiera una cláusula de 300.000 euros. El Real Valladolid llamó a la Sociedad Deportiva Huesca y los oscenses se negaron a negociar en una llamada muy corta. Los responsables de la entidad azulgrana se reunieron con Hidalgo y el entrenador entendió la postura de su equipo. Tras semejante culebrón llegó su primera respuesta al respecto: “Ha sido una semana más movida de lo normal, yo siempre noto el cariño de la gente, estoy encantado de estar en Huesca, es una ciudad y un club que me quiere mucho, esa confianza hace que uno esté muy a gusto. En la vida es importante tener ilusiones, pero hay gente que te da mucho y, en este caso, yo se lo tengo que devolver”, exponía el entrenador.
Hidalgo buscará la tercera victoria de la semana
El entrenador ha convivido su primer coqueteo con la Primera División con dos buenos resultados. En el Carlos Tartiere se rompió la peor racha de Hidalgo en el banquillo azulgrana con el mejor partido posible. Y este pasado miércoles se logró el pase de ronda en Tarragona que traerá a un Primera División a El Alcoraz. El objetivo de los azulgranas es cerrar la semana con un triunfo ante el Eibar: “Ganar siempre te da confianza, pero mañana viene un rival de mucho talento y calidad, con jugadores con mucho desequilibrio y habrá que estar atentos a eso. Hemos recuperado jugadores, tenemos más gente fresca, pero sabemos que será un partido igualado en el que tenemos que hacer valer nuestra fortaleza”, sentenciaba.