HUESCA | Hidalgo estaba feliz tras la victoria contra el Cádiz. No era para menos. El grupo ha sabido interpretar la partitura a la perfección y el resultado fue una espléndida victoria. Sigue el técnico del Huesca con los pies en el suelo, el liderato no le quita el sueño, quiere que la afición lo disfrute, más cuando se viene de un año complicado, “pero hay que seguir con humildad y seguir para llegar cuanto antes a esa cifra de 50 puntos”, ha subrayado. El preparador no escondió que debería bucear para encontrar un partido con mejor firma que el que se había visto este viernes en El Alcoraz.
Defendió el entrenador que su equipo “no ha sufrido en exceso”, sigue dando pasos firmes para que este Huesca haga de El Alcoraz un estadio rocoso para cualquier rival y no escondió que el triunfo le había llevado para estar “contento por los chavales”. Hidalgo recalcó que su equipo realizó un partido “completo” y subrayó lo que viene recalcando tras cada partido o en cualquier rueda de prensa: la importancia de tener pegada.
En relación al penalti de Sielva que sirvió para abrir el marcador después de haber fallado una oportunidad de gol desde los once metros, Hidalgo incidió en que la confianza que tiene en el jugador es absoluta y negó que hubiera tenido cualquier decisión en que fuera el encargado de lanzarlo. El entrenador subrayó, además, el buen fútbol de Jordi Martín, la “ambición” de Kortajarena por hacerse un hueco en el once inicial o el papel de Dani Jiménez, que acabó con un pinchazo por lo que habrá que ver el alcance de su molestia.