HUESCA | Antonio Hidalgo se mostró absolutamente satisfecho por el punto conseguido por el Huesca contra el Eibar, y también deslizó cierta amargura por las ocasiones que gozó Joaquín y algunos robos en zona peligrosa para haber marcado el segundo. El técnico de la SD Huesca recalcó que el empate era “un buen primer paso; es un punto de compromiso, de fe y de creer“. Reconoció el preparador de granollers que su equipo tuvo menos el balón que el rival, pero eso no significó que su equipo se sintiera exigido durante el encuentro. Es más, aseveró que “no he tenido sensación de agobio”.
Le gustó la propuesta de juego de sus chicos. Y en este sentido mostró cierto orgullo de que “en los duelos individuales la gente lo ha dado todo”. El preparador desveló que en el paso por los vestuarios puso el acento en que sus jugadores no se hundieran en defensa. El objetivo era evitar un constante bombardeo de balones desde los laterales en dirección a la portería defendida por Álvaro Fernández. El técnico se abrió a la posibilidad de que la propuesta defensiva varíe en función del rial y fue absolutamente directo cuando se le preguntó qué es lo que tiene que hacer más su equipo: “Ganar”.
Si el gol del Huesca fue en propia puerta, el del Eibar lo firmó Rubén Pulido. Y mal que le supo al técnico porque, afirmó, el defensa “ha hecho un partido muy bueno. (Su gol en propia puerta) son cosas del fútbol”. En el capítulo del debe y tras una semana ajetreada entre su fichaje, conocer los jugadores y preparar un encuentro contra un rival que venía de una racha de cinco partidos con cinco victorias, Hidalgo señaló que su equipo tiene que hacer más cosas para conseguir la victoria. Por otra parte, espera contar ya para la próxima jornada con Jorge Pulido y no pone fecha al regreso de Gerard Valentín.