HUESCA | Poco a poco, llega el día marcado en rojo en el calendario de aficionados de la SD Huesca y Gurrea. Tras todo un mes de agosto cargado de emoción, competitividad y deportividad, la final de la Copa Diputación de Huesca ha llegado. Así, este viernes, la SD Gurrea se medirá al Huesca ‘B’ a partir de las 20.00 horas en El Alcoraz. El encuentro será más que seguramente igualado, con poco que regalar, pues ambos equipos ya miran de reojo el inicio liguero, el fin de semana del 7 y 8 de septiembre.
Por un lado, el entrenador de la SD Gurrea, Jael Gilart, afirma que “veo al equipo ilusionado. Para todo futbolista, poder jugar en un estadio como El Alcoraz genera mucha ilusión y motivación. No llegamos en la mejor preparación, puesto que estamos en pretemporada, como es lógico, igual que lo que pasará al Huesca ‘B’, pero es un momento muy bueno para el futbolista, para sentirse lo que quieren llegar a ser”.
En este aspecto, Iñigo Ros, entrenador del filial oscense, tiene una visión muy similar declarando que “los chavales están súper ilusionados con la oportunidad de jugar una final y sobre todo por el escenario. No hay mejor escenario que El Alcoraz, porque nuestro objetivo es intentar aportar el máximo número de jugadores al primer equipo”.
Asimismo, Gilart comenta que espera un escenario complicado, pues “ellos llevan más ritmo de competición y tienen esas ganas de demostrar en su casa. A nivel físico esperamos que estén un puntito por encima nuestro, pero lo intentaremos combatir de la mejor manera posible”. A fin de cuentas, el Huesca ‘B’ “es de una categoría superior que la nuestra. Nosotros esperaremos a tener nuestros momentos, buscaremos hacer un buen papel y el premio ya lo tenemos que es jugar en El Alcoraz y ahora todo lo que podamos hacer, pues bienvenido sea”.
Iñigo Ros, por su parte, coincide con Gilart en que “esperamos un partido difícil”, y considera que “el Gurrea está ahí por méritos propios. Ha dejado fuera un equipo de Tercera RFEF como el Monzón. La igualdad va a existir y, desde la humildad, intentaremos hacer las cosas que venimos trabajando en los entrenamientos para poder sacar un buen resultado y ganar la final”.

Cada equipo ha tenido que superar hasta tres escollos en forma de rivales para llegar la última ronda. La SD Gurrea tuvo, en octavos, que vencer al Robres por 2-1 con un gol de Javi Zamora de chilena en el último suspiro, al Sabiñánigo en cuartos por un cómodo 4-1 y al Monzón en una remontada de infarto por 2-1 en las semifinales. Este equipo parece que tiene duende y, respecto a esto, Gilart explica que “todo es un poco a base de ganas, de persistir. Ha habido momentos en los que hemos sido superiores y otros en los que nos han superado. Creo que, en todos los partidos, el Gurrea siempre ha creído un poquito más. Esto es lo que nos ha permitido llegar a los últimos minutos de ambas partes siendo un pelín superiores al rival. Entonces, eso ha hecho que al final podamos conseguir esos resultados positivos y podamos pasar rondas”.
No obstante, el técnico afirma que “todavía no tenemos un estilo de juego definido como tal”. A fin de cuentas, “llevamos cuatro semanas de trabajo y al tener competición entre semana y el fin de semana con los amistosos programados, es verdad que no tenemos un modelo rígido. Hemos podido trabajar juntos y la idea es que se sepan adaptar a lo que se van a encontrar. No es lo mismo jugar, por ejemplo, este fin de semana en El Alcoraz como jugar en nuestra casa. Intentaremos que todos rememos en la misma dirección, que yo creo que es un poco la esencia que tiene que tener el Gurrea”.
Por otro lado, Ros, que venció 2-0 al Almudévar, 0-3 al Fraga ‘B’ y 1-2 al Ontiñena, ve la filosofía de su SD Huesca ‘B’ desde otra perspectiva. Para el entrenador, lo más importante en este proceso de reflexión y preparación es “intentar que los jugadores sean inteligentes, que sean capaces de adaptarse bien a los contextos y ser dominadores”. De todas formas, el míster del filial oscense es sabedor de que en una categoría tan igualada y disputada como Tercera RFEF “hay que ser capaces de adaptarse a los contextos y ese es nuestro trabajo”.
Ahondando un poco más en el filial oscense dirigido por Ros, este sorprende, a pesar de ser un filial, por la juventud que atesora en sus filas. Una edad media de 20 años en Tercera RFEF es una espada de doble filo, pues, por un lado la alegría y la pillería están a la orden del día, pero, por otro lado, la experiencia es un grado y más en una categoría tan igualada como esta. “No me asusta la inexperiencia, creo que al final, como todo en la vida, no solamente en el fútbol, hay que dar la oportunidad a los chavales, en el trabajo también”, explica el técnico, que lanza una pregunta al aire: “¿Cómo van a tener experiencia si no los coges?”. No obstante, Ros sabe que “hay jugadores jóvenes que el periodo adaptativo les costará más”, pero subraya que “estamos en disposición de competir en cualquier campo y encantado con todos”.
Uno de los aspectos en el que coinciden ambos técnicos es la utilidad y el buen funcionamiento de esta primera edición de la Copa Diputación, gracias a la cual se han dejado algo más de lado los clásicos amistosos de pretemporada y ha instaurado un modelo competitivo, más real a la Regional Preferente y Tercera RFEF en la que compiten los participantes. “Es un torneo muy motivante, porque no vamos a poder enfrentarnos todos los días a equipos de Tercera RFEF. Nos ha permitido tener esos partidos de alta intensidad desde el principio con ese punto de competitividad”, explica Gilart, que también añade que esta Copa Diputación ha servido para reenganchar a la afición desde bien pronto: “El motor de la SD Gurrea es la afición y es verdad que con estos partidos se ha enganchado, está emocionada y esta semana nos van a arropar en El Alcoraz”.
Similar visión la de Iñigo Ros, que coincide con Gilart en que “este torneo sirve para darle ese punto de competencia a los partidos amistosos”. Al final a todo el mundo le gusta saborear la victoria, el vencer a un rival y el sentir el calor de una afición orgullosa por conquistar un título, sea veraniego o en plena temporada. “Te gusta ganar y hacerlo con un objetivo siempre es más motivante para todos”, sentencia.
Con todo ello, tanto Huesca ‘B’ como Gurrea están deseando que lleguen las 20.00 horas y que el balón eche a rodar sobre el césped de El Alcoraz. La prueba definitiva antes de empezar la temporada regular, está a punto de llegar.