La SD Huesca logró ante el Málaga volver a quedar imbatido. Los de Ziganda encadenan dos triunfos consecutivos con un rasgo en común: la portería a cero. Como ocurrió en el Ciutat de València en la primera jornada, el Huesca ha vuelto a demostrar poder ser ese equipo sólido y sin fisuras que pretende el ‘Cuco’, con un modelo de juego claro en el que no cometer errores en zonas de riesgo resulta fundamental.
El inicio de campaña para los azulgranas no ha sido sencillo. Pese al buen empate cosechado frente al Levante, Cartagena y Albacete pusieron la puntilla en dos partidos marcados por un alto ritmo y goles encajados en los últimos compases. Sin embargo, la goleada contra el Ibiza supuso un primer reseteo que se ha acentuado en el último enfrentamiento.
En las derrotas ante Cartagena y Albacete, el Huesca concedió cuatro y siete remates a puerta (y otros muchos desviados), respectivamente, y encajó un total de cinco goles, los únicos que ha recibido. No obstante, frente a Ibiza y Málaga Andres Fernández solo intervino una sola vez. Un descenso de la ocasiones de peligro que se ha visto reflejado en los resultados.
Blasco y Timor, pareja fiable
El Huesca ha recuperado su condición de imbatido con una línea defensiva formada por Ratiu, Jérémy Blasco, Timor y Florian Miguel. Quienes están rindiendo mejor de lo esperado son los centrales: Blasco, que no contaba para Ziganda, y Timor, un mediocentro reconvertido a central cuyas prestaciones atrás eran toda una incógnita. Todas las dudas han quedado más que solventadas.
En el último duelo, la defensa del Huesca bloqueó hasta cinco remates visitantes, dos de ellos por Blasco. El francés y Timor realizaron seis recuperaciones (tres cada uno) y hasta 13 despejes, todos ellos dentro del área propia. Además, no fueron superados en ninguna ocasión. Jérémy hasta puso un pie providencial para evitar un remate a placer de Rubén Castro que hubiese supuesto la ventaja del Málaga.
Un dato histórico
La condición de imbatido que ostenta el Huesca en este comienzo de temporada le hace obtener un nuevo récord. Y es que el cuadro altoaragonés nunca había conseguido dejar su portería a cero en tres de los primeros cinco encuentros del inicio de la competición.
Los azulgranas están demostrando una mejora manifiesta en su rendimiento que, por el momento, les permite no tener que elegir entre taparse los pies o la cabeza. La manta todavía es larga. Y Ziganda tiene claro que, mientras los pies funcionen… la cabeza, mejor bien cubierta.