HUESCA | En la mañana de este lunes, Ignasi Vilarrasa ha puesto voz al vestuario azulgrana. Durante la comparecencia ha valorado las primeras semanas de trabajo del equipo dirigido por Antonio Hidalgo, destacando, en primer lugar, la gran confianza que tiene la SD Huesca en él, siendo la tercera temporada del lateral izquierdo en las filas oscenses y, por tanto, armándose de galones para este curso. “El club me ha transmitido una confianza enorme. Saben que este año, debido al paso adelante que di, soy un jugador de garantías para este año y así me lo han hecho saber. Al final uno agradece esta confianza que tiene el club conmigo”, ha explicado.
No en vano, el defensor ha disputado 40 partidos durante este pasado curso 2023/24, siendo uno de los hombres más capitales para Antonio Hidalgo. “Al final sabemos cómo es esto del fútbol y el club estaba pasando una situación delicada. Estoy muy feliz aquí en Huesca, que es el club que me dio la oportunidad de jugar en el fútbol profesional”, ha dejado claro el jugador.
Asimismo, Vilarrasa ha añadido sobre su continuidad que “es verdad que a principio de mercado cada jugador tiene su mundo. En función de la temporada que has hecho puedes tener ofertas o no. Yo dejo ese trabajo a mi agente. Estoy muy contento aquí y aunque al final el mercado es muy largo yo ahora mismo estoy muy centrado en seguir en el Huesca”.
De hecho, el jugador considera que “el año pasado creo que sí que di el paso adelante que tanto la gente como yo esperaba. El primer año fue un año de adaptación a la categoría y el año pasado, a raíz de la llegada del míster, creo que crecí mucho, di el paso que tenía que dar a nivel futbolístico y me sentí muy cómodo, tanto con el sistema como con la manera de jugar”. Por ello y para seguir progresando, Vilarrasa no esconde sus galones y es consciente de que “el objetivo de esta temporada es no bajar ese nivel, asumir que este curso voy a ser de los jugadores que lleva más años en el club y tengo que ayudar la máxima porque queremos pasar un año lo más tranquilo posible”.
Por otro lado, y pasando al aspecto más táctico, el defensor ha remarcado que no le importa en qué posición jugar, ya sea como lateral en una función más defensiva o con mayor libertad para pasar al ataque como carrilero. “Me siento cómo en ambas. Es verdad que jugando como carrilero estás más protegido porque tienes siempre tres centrales detrás y tienes mucha más libertad para subir o incluso entrar a rematar cuando hay jugadas desde la banda contraria”.
Para lograr esta libertad posicional, Vilarrasa ha subrayado que el curso pasado adquirió un aspecto clave: la experiencia. “Cogí el punto de madurez defensivo que creo que me faltó el primer año y me encuentro cómodo en ambos sistemas. Soy un jugador que cuanta más libertad tenga se siente mejor, porque cuando tienes confianza y jugadores que te ayudan salen las cosas a nivel defensivo”.
En relación a esto, el efectivo ha incidido en que uno de los factores más determinantes para realizar un buen curso es seguir defendiendo bien. Además, gran parte de los defensores se conocen de cursos pasados, pues la zona de atrás no ha variado en exceso más allá de la vuelta de Dani Jiménez a la portería, Diego González como central y Toni Abad en el lateral derecho. Esto significa mayor química entre sí. “Cambiando dos jugadores seguimos teniendo la misma defensa que el año pasado. Tenemos que mantener los buenos números defensivos, pues la salvación, en Segunda, parte de ahí. Estamos reforzándonos y trabajando la salida desde atrás con balón. El año pasado con la situación delicada era difícil cambiar cosas. No Podemos bajar ni un punto en el nivel defensivo.
El amistoso ante el Tarazona
Finalmente, el jugador ha repasado el choque disputado este pasado sábado, ante la SD Tarazona, que correspondió al primer encuentro de pretemporada para ambos conjuntos aragoneses. “Es para coger el tono físico, sensaciones y confianza. A nivel personal me encontré bien, estamos bastantes jugadores del año pasado y ya tenemos cogidos los conceptos que el entrenador nos pedía. Me sentí cómodo, sabiendo que nos falta coger el ritmo de competición y poco a poco cogiendo sensaciones con balón”, explicaba al respecto un Vilarrasa, que considera que “a nivel de equipo, en la primera parte nos costó un poco más, pero era normal porque la temperatura era muy alta y era nuestro primer partido. Poco a poco, con el paso de los minutos, empezamos a plasmar lo que estamos trabajando tanto a nivel defensivo como ofensivo. Para ser el primer partido de pretemporada, creo que las sensaciones fueron buenas”, ha acabado.