Deja vu. Es lo que creen estar sufriendo los aficionados zaragocistas al mirar las estadísticas de los últimos partidos. Y es que vuelven los nefastos recuerdos de años anteriores -sobre todo en la pasada campaña- en los que el Real Zaragoza disparaba a portería en repetidas ocasiones sin llegar a conseguir del premio del gol y llevaba la ineficacia por bandera. Y en los últimos partidos vuelven a asomar estos fantasmas.
Volvió a caer el Real Zaragoza en La Romareda frente a un Albacete muy mermado en la zaga por múltiples y diversas bajas. Y ni con esas consiguió el conjunto maño hacerle gol a Tomeu Nadal, quien tuvo gran parte de culpa. “Solo conseguiremos meter si es de penalti”, se escuchaba entre el bochorno de la grada de La Romareda. Pero ni aún así.
Y es que el problema que tiene el Real Zaragoza frente a la puerta es muy complejo. Desde la baja de Dwamena, las prestaciones ofensivas del equipo dirigido por Víctor Fernández son prácticamente nulas. Se crea en tres cuartos, pero ninguno de estos jugadores consigue ayudar a Luis Suárez en la tarea del gol. Ahora llega Javi Puado, teórico sustituto del punta ghanés, pero poco se asemeja al africano.
El Zaragoza, líder en disparos a portería y en ineficacia en la última jornada
Aún así, el Real Zaragoza refleja un atisbo de esperanza. O lleva a sus aficionados a tirarse de los pelos. No lo sé. Lo que está claro es que de las botas de sus jugadores siguen emanando ocasiones. Solo hace falta, como decía, materializarlas. Y esto quizás no sea solo tarea de los puntas. Kagawa, Papu, Pombo, Blanco y Soro deben de dar un paso adelante.
Como se muestra en la imagen, el Real Zaragoza fue la pasada jornada líder en disparos a puerta junto con el Racing de Santander con ocho lanzamientos cada uno. Sin embargo, el conjunto maño chutó un total de dieciséis veces, dos más que los cántabros. Así, el equipo de la capital aragonesa se convierte en el tercer equipo que más veces disparó en toda la jornada tras Ponferradina y Tenerife, con veinte y diecisiete disparos respectivamente según datos recogidos de sofascore por parte de @vintage_stats.
Además, según ofrecen en la gráfica, el Real Zaragoza promedia 4,8 disparos por partido. Así, se coloca líder de la categoría en esa estadística empatado con el otro equipo aragonés, la Sociedad Deportiva Huesca. Sin embargo, es el conjunto zaragocista el equipo que más aprovecha esos disparos, con 21 goles a favor frente a 19 de los oscenses. Aún así, el conjunto azulgrana tiene un balance de goles más equilibrado con tan solo 13 goles en contra frente a los 18 encajados por los blanquillos.
Estos datos nos muestran una clara conclusión: el Zaragoza no puede seguir desperdiciando todo el fútbol que genera de tres cuartos hacia delante. La creatividad de Kagawa, el ingenio de Soro, el golpeo de Papu, el corazón de Pombo y el descaro de Blanco deben de aparecer por el césped de La Romareda.
El Real Zaragoza, con una defensa en cuadro por las lesiones de Vigaray y Atienza y con una portería coja sin Cristian debe empezar a carburar de cara a portería. No se puede permitir malgastar todos los cartuchos que tiene para ganar los partidos. El equipo no puede seguir haciendo de la ineficacia de cara a portería algo habitual. La solidez en las áreas era clave en el brutal inicio de campaña que tuvo el equipo y debe volver ipso facto.