Íñigo López atendió a los medios de comunicación tras el entrenamiento del equipo en el IFPE Montearagón.
El central comenzó afirmando: “Ahora van bien las cosas, pero hay que aprender de la mala racha que tuvimos al inicio de año, esta liga es muy larga”. El riojano explicó: “Cuando la cabeza funciona todo es más fácil, son rachas”, y además recalcó: “Somos un equipo y todos queremos jugar, aquí somos 22 jugadores hay que estar disponibles para participar”.
El azulgrana manifestó que “ya me siento bien, he olvidado aquella lesión. Desde finales de noviembre me veo bien. Me encuentro al cien por cien”. Íñigo recordó que “sabemos cuál es el objetivo del Huesca. El equipo debe crecer desde abajo, hay que ir poco a poco y trabajar”, y añadió: “No quiere decir que no tengamos ambición, pero el objetivo es la salvación. Ahora mismo faltan 10 puntos, que todavía no están”.
Íñigo, sobre el Mallorca: “Será muy complicado, no podemos desmerecer a nadie”
El ’21’ recalcó que pese a su gran momento, “por un jugador no cambian las cosas, es trabajo de equipo, de los 11 que juegan, los tres cambios y los ocho que entrenan día a día. El míster va cambiando piezas y salen las cosas, pero cuenta con los 22″.
El defensa destacó que el próximo choque será “muy complicado y tenemos el ejemplo del año pasado. El Mallorca está haciendo bien las cosas, quizá le falte fortuna, y no podemos desmerecer a nadie”.
Íñigo López comentó para finalizar que en general al Huesca cuesta mucho ganarle: “Tenemos un bloque. Se ve un trabajo de un equipo que sabe a lo que juega. Nos exigimos y nadie nos va a ganar fácil, la ambición sigue intacta”.