La SD Huesca recibía la visita del todopoderoso Sevilla FC, en un duelo vital para ambos. Los locales buscaban aferrarse al sueño de la salvación y los hispalenses recuperar sus puestos de Champions. Al final, éxtasis en El Alcoraz con el gol de ‘Chimy’ ávila cuando agonizaba el encuentro, ante el mejor rival que ha pasado por el estadio azulgrana esta temporada. A continuación pasamos a valorar la actuación de cada jugador con las puntuaciones del 1×1 y un análisis individualizado.
Santamaría (6,5)
Colocado: Esta SD Huesca con Roberto es otra. Ha alcanzado un nivel de madurez y confianza que se transmite y, no solo eso, viene bendecida con la fortuna tantas veces esquiva. Seguro en casi todas las acciones por alto, se marcó dos buenas paradas en una segunda parte de asedio visitante. En el penalti fue bien engañado por Ben Yedder.
Miramón (7)
Lesionado: Una pena su lesión porque estaba cuajando una primera mitad muy buena. Activo y profundo en ataque, de sus botas nacieron varias llegadas con centro que a punto estuvieron de acabar en gol. Defensivamente se aplico a fondo para parar a Promes y salvó una doble ocasión bajo palos clarísima.
Etxeita (7)
Fiable: En un partido de tanto dominio visitante -sobre todo en la segunda mitad- tuvo que tirar de jerarquía, veteranía y mucha casta. Por ese perfil, su trabajo junto al de Jorge y luego David, posibilitó que el equipo no sufriera en exceso.
Diéguez (7)
Rematador: Qué poco le faltó para enviar a las mallas un buen córner sacado por Ferreiro. Su anticipación y remate fueron casi perfectos. Por lo general y salvo alguna disputa algo blanda al inicio, estuvo muy seguro, sobre todo por arriba, donde sacó casi todo lo que por su lado pasaba. Sacó bajo palos un remate que parecía gol.
Pulido (8,5) | EL MEJOR
Mariscal: Les toco bailar -junto a Galán- con la banda más fea del rival. Pero aun así, su capacidad para anticiparse, para subsanar errores y para infringir carácter le dieron la vida al equipo. Su fe y su parte de locura, posibilitaron una asistencia que llevó el delirio a las gradas.
Javi Galán (7,5)
Tenaz: Pese a ser el futbolista con más trabajo del partido, el que seguramente más sufrió con las acometidas del rival. Se marcó un manual de morder, pelear y cerrar su banda con tenacidad y mucho trabajo. No solo eso, sino que regaló una asistencia magistral a Juanpi.
Yangel Herrera (7)
Mejorado: Había debate acerca de quien supliría la baja importante de Rivera y lo cierto es que el venezolano cumplió. Aplicado mucho más en tareas defensivas, estuvo en casi todas y siempre con acierto, dejando un trabajo inconmensurable. Su penalti pudo ser evitable. Eso sí, resulta raro que el VAR no señalara fuera de juego en el inicio.
Moi Gómez (7)
Infatigable: Cuánto trabaja y a veces qué poco se le luce. Es de esos obreros con guante blanco, que se pasan el partido corriendo y trabajando en busca de esa bola deseada, de ese pase desahogador. Al final, acabó fatigado por el trabajo realizado.
Juanpi (7,5)
Pausado: Definió como lo hacen los grandes futbolistas. Ese control orientado y picadita suavecita, parecieron fáciles de ejecución por su aparente facilidad y tranquilidad. Un gol de mucha clase. Una lastima no aprovechara una exquisita asistencia de Gallego para poner más tierra de por medio.
Enric Gallego (8)
Generoso: Ya son varias jornadas las que da mucho más de lo que recibe. Ayer realizó una ‘masterclass’ acelerada de como bajar, guardar y descargar a sus compañeros. Y eso, ante un Kjaer imponente. Un auténtico lujo para un equipo, que ha cambiado su cara ofensiva con el catalán.
Ferreiro (7,5)
Multifuncional: Es el comodín de esta SD Huesca. Da igual que actúe de segundo punta, que acostado a cualquier banda, que jugar de carrilero, siempre cumple y siempre con nota. Tiene trabajo, personalidad con balón y una inquebrantable fe para levantarse de los malos momentos. Otro lujo y otro tesoro al que cuidar.
Los cambios
‘Chimy’ Ávila (8)
Extasiado: El gol le define como lo que es: un guerrero alocado por el gol. Si algo tiene ese eso, gol. Y lo demostró en un partido donde le tocó salir desde el banco y a base de fe, de garra y lucha, aprovechar su oportunidad. Suple sus carencias con todo lo anterior.
Gallar (6)
Impreciso: Una pena le faltara esa chispa de velocidad, confianza o acierto, para ser más preciso en sus internadas marca de la casa. El tinte de partido le venía como anillo al dedo, pero unas veces ese control largo, otras una conducción excesiva, evitaron que su actuación pasara de decisiva a algo más discreta.
Musto (6)
Combatiente: Si algo tiene el argentino es gen competitivo. Salió y casi se partió la cara en una disputa. Sin mucho tiempo para más y donde apenas tuvo incidencia con la pelota, le tocó trabajar y fajarse como el resto de compañeros.
NOTA GLOBAL: 7