ZARAGOZA | En el mundo del fútbol, las dinámicas juegan un papel muy importante. El rendimiento dentro del campo puede llevar al futbolista a la trascendencia en el once titular, pero también puede llevar a dicho jugador al más absoluto ostracismo. Un buen ejemplo de estas dinámicas reside en la figura de Jair Amador. El rol del defensor ha cambiado significativamente en las últimas semanas, convirtiéndose ahora en el cuarto central de la zaga del Real Zaragoza.
El inicio de Jair fue soberbio, así como también lo fue el de su pareja en la zaga, Alejandro Francés. El sensacional entendimiento de ambos futbolistas y el gran desempeño individual del luso-caboverdiano se trasladó al verde y se reflejó en las estadísticas. Y es que el Real Zaragoza encajó tan solo 1 tanto en las primeras 5 jornadas con Jair Amador en el campo. Sin embargo, el rendimiento del central fue disminuyendo a la vez que lo hizo el del equipo que en aquel entonces dirigía Fran Escribá. Con el paso de las semanas, Jair pasó de ser un elemento clave en el once titular a ser el último defensa en la rotación del conjunto aragonés.
En la actualidad, la presencia del defensor sobre el terreno de juego es prácticamente nula. En los últimos 6 partidos, Jair Amador no ha disputado ni un solo minuto, y en el presente año 2024 únicamente ha jugado un partido. Eso sí, disputó los 90 minutos en el Pepico Amat frente al CD Eldense. Si nos remontamos a 2023, podemos observar que este dato es muy inusual. Hasta su primera suplencia, Jair tuvo minutos en todos los encuentros de liga salvo en uno. Frente al Andorra -última victoria del cuadro blanquillo fuera de casa-, Jair se quedó en el banquillo durante la totalidad del encuentro. El descanso del central se puede explicar a través de la carga de partidos a la que el Real Zaragoza fue sometido durante esa semana, pues tuvo que jugar 3 partidos en 8 días.
Declive marcado por los errores
Uno de los principales factores que han propiciado el ostracismo de Jair Amador es la acumulación de errores cometidos en sus últimos partidos. La falta de concentración, así como los fallos defensivos, han lastrado a un futbolista que seguro que no está viviendo sus mejores semanas de su carrera deportiva.