Juan Ignacio Martínez ha tenido que hacer frente a la rueda de prensa más complicada desde que es entrenador del Real Zaragoza. Con la derrota por 2-1 contra el Leganés, un rival directo por evadir los puestos de descenso, los focos de la crítica han penetrado una capa más y apuntan directamente a Jim. El que fuera hace menos de un año el salvador de un equipo a la deriva, ahora sufre el inevitable desgaste que acarrea no ganar desde el 6 de diciembre. Mucho tiempo de sinsabores para una afición cansada. Muy cansada.
“Soy una persona siempre positiva, que ve la botella medio llena. La situación del equipo era más caótica el año pasado. Si me veis débil, decídmelo a la cara. Soy el capitán del barco y los jugadores deben fijarse en mi energía”. De esta forma respondía a la prensa tras ser preguntado por su situación, tanto personal como profesional dentro del club. El técnico alicantino se ha querido trasladar este mensaje de optimismo, que a tal y como están transcurriendo los meses, los zaragocistas ya no compran. Incluso el propio Jim no parecía demasiado convencido de sus palabras.
“Cuando te esfuerzas, haces una primera parte muy buena, sales del vestuario y encajas el gol, el aspecto anímico no es el mejor”, ha asegurado Jim. Aunque lo cierto que elReal Zaragoza, al igual que en Ibiza, fue de más a menos. En la segunda mitad, en la que se acabó decidiendo el partido, el conjunto del león apenas mostró garra hasta los insuficientes minutos finales.
Este Zaragoza desespera. El equipo no gana, no genera y no ilusiona. “Llevamos muchas jornadas sin ganar y el fútbol solo entiende de victorias”. Dos obviedades que Jim ha querido resultar. “Esa racha de nueve empates pasó a ser tres victorias, y esta vez ha sido derrota. Debemos romper la dinámica por la autoestima del jugador, y que crean en lo que hacen. Se lo dejan todo sin premio”, ha añadido el cuestionado entrenador zaragocista.
El Leganés ha hecho estallar una bomba cuya mecha era ya muy corta. Con esta derrota, el Zaragoza se queda a expensas de lo que haga el Amorebieta para analizar su complicada situación con respecto al descenso. “No podemos pensar en milongas. Debemos pensar en la próxima victoria. Hay que sumar. Llevamos mucho tiempo sin ganar. Los chavales se dejan todo, van al límite, pero hay que ganar, como sea, y más el próximo partido en casa”, ha dicho Jim.