Joaquín Muñoz analizó las sensaciones del equipo tras la derrota en Can Misses y las posibles aspiraciones a las que se puede llegar. Serio, autocrítico y asumiendo responsabilidades, el joven extremo se mostró dolido tras no puntuar la pasada jornada, pero con la ambición de lograr una racha positiva que les acerque a la zona privilegiada de la competición.
Los tres puntos no pudieron viajar a tierras oscenses el pasado sábado. Ni siquiera un único punto. Los últimos buenos resultados fueron cortados en seco tras el segundo gol del Ibiza y los aragoneses no supieron reaccionar. «Nos vimos dentro del partido en muchas ocasiones. Es doloroso. Solo nos queda mirar hacia adelante. Tenemos una plantilla muy buena. Hay que pensar en grande», dijo a preguntas de los periodistas.
La temporada, hasta ahora, no está siendo nada buena. La SD Huesca se sitúa a seis puntos de los puestos de play-offs. «Es una categoría jodida. Tenemos que pensar quiénes somos y de dónde venimos», explicaba. Tras el descenso a Segunda División, los azulgranas solo tenían en mente ocupar una plaza en los puestos de ascenso. El extremo, ejerciendo de líder, hacía autocrítica sobre el nivel de juego del equipo. «Tenemos una responsabilidad. Tenemos que dar un paso hacia adelante todos si queremos volver a la máxima categoría del fútbol español», declaró Joaquín.
Asimismo, Joaquín Muñoz lanzaba un mensaje de optimismo a la afición y agradecía el respaldo constante, tras viajar más de cien voces oscenses en Ibiza. «Sabemos de la importancia de jugar en El Alcoraz. Necesitamos el apoyo de la afición más que nunca. Han estado apoyándonos todo el año, que confíen en nosotros», subrayó el malagueño.
Joaquín Muñoz levanta la voz
En el momento que era preguntado por la presión que podía tener la plantilla, Joaquín Muñoz se desentendía de ello. «Presión para el médico que tenga que salvar una vida. Somos jugadores, tenemos que tener esa responsabilidad. Sabemos dónde estamos. Hay que empezar a coger galones», aseveró consciente de la situación del equipo.
Uno de los errores que más está penalizando al cuadro altoaragonés es el inicio de cada encuentro. Los de Xisco han encajado un total de cinco goles en los últimos seis choques, únicamente contando la primera media hora de juego. «No podemos entrar al partido y que en la primera jugada nos empapelen. Hay que estar más espabilados. ¿Lo queremos de verdad? Vamos a por ello», concluyó.