HUESCA | El Bada Huesca atraviesa uno de los momentos más delicados de su historia reciente en la Liga Asobal. El equipo oscense es colista con siete puntos, los mismos que necesita para salir del descenso, cuando restan once jornadas de competición liguera. A pesar de una temporada marcada por lesiones, salidas inesperadas y dificultades logísticas, José Nolasco, su técnico, sigue confiando en la salvación del equipo: “Nunca, jamás vamos a rendirnos”, explica en una entrevista con este medio.
Más allá del periplo liguero, el Bada Huesca ha conocido este miércoles su rival en la tercera ronda de la Copa del Rey, que se disputará el 9 de abril: el Eón Alicante. Nolasco valora el emparejamiento positivamente, sobre todo porque evita desplazamientos largos y enfrentamientos con equipos de la misma categoría. “Si nos tenía que tocar uno, que al menos fuese cercano. Además, es un rival de una división inferior, lo que en teoría nos da más opciones, aunque tendremos que jugar en su casa”, explica el técnico, que además puntualiza: “Vamos a plantear la Copa como un partido a ganar, a intentar entrar en esa fase final, pero verdaderamente esta temporada nuestro objetivo principal no es intentar ganarla. Aunque la vamos a luchar, el objetivo principal es mantener la categoría”.
Pese a que el Eón Alicante se encuentre en la División de Honor Plata, el duelo no será fácil, y Nolasco lo tiene más que claro: “Tiene muchísimos jugadores que han pasado por la Liga Asobal (Ander Torrico, Darko Dimitrievski o James Parker) y un entrenador (Fernando Latorre) que conoce bien la competición. Su proyecto es para ascender a Asobal y el partido no va a ser nada fácil. Está arriba de la clasificación de la segunda categoría. Eso dice mucho de ellos”, afirma el entrenador. Además, volverá a pisar terreno valenciano, muy cerca de su casa al ser natural de Elche. “Volver a tu tierra siempre es muy agradecido, pero al final lo que hago es enfrentarme a un rival. Para mí es especial, pero cuando empiece el partido, solo pensaré en ganar”, añade.

Volviendo al presente, el Bada Huesca tiene un reto mayúsculo en la próxima jornada liguera, ya que se enfrenta al FC Barcelona, el mejor equipo de la competición. No obstante, Nolasco es realista y fija la mirada en el siguiente partido, contra Cangas: “Vamos a intentar luchar contra el Barça para que nuestros aficionados se sientan orgullosos, pero la verdadera final es contra Cangas. Ahí necesitamos los dos puntos sí o sí”.
El técnico destaca las dificultades que han afrontado esta temporada, especialmente en términos de lesiones. “Jugamos contra Torrelavega con solo 14 jugadores disponibles. Cinco de nuestros jugadores más importantes han pasado por el quirófano. Y a eso se suman problemas burocráticos con Drasko Nenadic, que lo intentará resolver este fin de semana que no hay partido, y Charlie Pérez, que ojalá pueda estar contra Cangas”.
Por todo ello, el entrenador no oculta su frustración: “Esta temporada se han conjuntado todos los astros para que todo nos haya salido en contra. Desde empezar un mes más tarde en el Palacio de los Deportes hasta que les pagaron las cláusulas a algunos jugadores para irse (Pepe Flores y Rodrigo Benites). Encima, algunas de nuestras incorporaciones han llegado y se han lesionado. Ahora mismo estoy en mi tercera o cuarta pretemporada con un equipo totalmente distinto”.
De hecho, Nolasco hace especial hincapié en este desajuste de preparación con respecto al resto de la Liga: “Nos encontramos en octubre mientras los demás están en marzo. Hemos tenido que reconstruir el equipo varias veces y eso se nota”. Y recalca la dificultad de competir en estas circunstancias: “Si todos los equipos estuvieran en las mismas condiciones que nosotros, es decir, con el equipo aún formándose, estaríamos bastante arriba. El problema es que ellos están consolidados y nosotros seguimos en plena fase de construcción”.
Pese a la complicada situación, Nolasco mantiene la fe en la permanencia: “Nunca vamos a tirar la toalla. Hemos demostrado que podemos ser competitivos contra equipos potentes como Cuenca o Bidasoa. Pero cada jornada que pasa, cada error pesa más. Necesitamos acertar y sumar puntos”. Y deja un mensaje claro a los suyos: “No tenemos margen de error. Cada vez es más necesario puntuar. Hemos sido competitivos contra rivales muy fuertes, pero ahora necesitamos ganar y lo sabemos”.