Este viernes llega el trail Canfranc-Canfranc. Se abre la edición número 13 de una de las carreras más exigentes del calendario nacional. Montaña pura donde se desconoce lo que es una recta. Y a gala que lo tienen sus organizadores. Un trail que en esta ocasión tendrá en la línea de salida al ganador de la primera edición, Salva Calvo. Una Canfranc-Canfranc concebida como una ventana del territorio. Y es que en línea de salida habrá corredores de 10 nacionalidades, de todas las comunidades de España y en la que las mujeres tienen una fuerte presencia a diferencia de lo que ocurre en otras. El 15% son ellas.
Los pormenores de la Canfranc-Canfranc han sido presentados hoy en el Ayuntamiento de Canfranc. En la misma, el alcalde de la localidad, Fernando Sánchez, ha deslizado que la prueba opta a la Copa del Mundo del próximo año y baraja, seriamente, pujar por el Campeonato del Mundo, si logra el respaldo económico necesario. Canfranc entiende que el deporte es una ventana para dar conocer el territorio y cuenta con montaña y logística suficiente para dar ese salto. En caso de conseguirlo se trataría de las distancias de Maratón y 16 kilómetros, y no habría que cambiar el actual trazado ni, por tanto, los desniveles. Las únicas modificaciones estarían dirigidas a la logística. El gran sueño es ser sede en 2020.
Presupuesto de la Canfranc-Canfranc
El actual presupuesto de la carrera oscila entre los 50.000 y los 55.000 euros, que es cubierto en un porcentaje muy alto por las inscripciones. La carrera, además, cuenta con el respaldo de instituciones y de empresarios y empresas de la zona que ven cómo la mayor parte de los participantes -74%- son de fuera de Aragón y muchos de ellos vuelven antes y después de la prueba con lo que hay un buen retorno a su inversión.
La Canfranc-Canfranc de este viernes volverá a ser un ‘paseo’ circular por lugares emblemáticos de la localidad y su zona de influencia. Se trata de una carrera dura. Como reza su lema, se trata de “los 100 kilómetros más largos del mundo”. Una prueba con dos noches -la salida es a las 00.00 de este viernes- y que requiere de un importante aparato logístico para dar cobertura a los participantes en la que la seguridad es clave. En este punto, el papel del Ejército es clave. Y de esta forma, la Emmoe moviliza sus equipos sanitarios con el personal necesario para dar cobertura ante cualquier accidente y a cualquier hora, tal como señaló, el comandante sanitario de la Emmoe, Jorge Palop.
La prueba estrella es la de 100 kilómetros y 8.848 metros de desnivel positivo en un guiño claro a la altitud del Everest. Pero además, hay otras carreras cada una de ellas -75, 45 y 16 kilómetros-con su nivel de exigencia y una andada que este año incorpora la organización. En total van a ser 883 deportistas los inscritos a una edición que tan solo está a la espera que la meteorología sea benigna. No es para menos. De las cuatro últimas ediciones, en dos ha sido necesario neutralizarla. La previsión, adelantó el director de carrera, Álex Varela, es de tiempo estable y la tendencia es que si hay lluvias con el paso de las horas disminuyan.
