La última década del Real Zaragoza quedará grabada en los libros como la más negra de su historia. Desde descensos hasta casi la desaparición. Pasando por juicios, cambios en la dirección y una retahíla de jugadores cuyos nombres han pasado por la memoria del aficionado zaragocista sin pena ni gloria. Sin embargo, si algo positivo ha conseguido el Real Zaragoza durante esta década, ha sido una amplia y variada producción de delanteros centros. Muy diversos, aunque con una similitud, el gol entre ceja y ceja. La lista es larga, y buena. Más aún cuando se trata de un equipo que ha estado a la deriva durante tantos años. Un equipo que ha sabido rentabilizar la posición más codiciada en el mercado futbolístico, la figura del ‘9’.
Hélder Postiga, ‘Postigol’
Hablar de Hélder Postiga significa hablar del último delantero del Real Zaragoza de Primera. El ‘9’ portugués no pudo evitar lo inevitable, un descenso a la, por entonces, Liga Adelante. Las horas del equipo maño en la máxima categoría del fútbol español parecían acabarse tras varios años tentando a la suerte. Postiga llegaría al Real Zaragoza el 31 de agosto de 2011 por un millón de euros, justo antes de cerrarse el mercado de fichajes. Tras una adaptación algo costosa, el ariete portugués se deshizo de la presión anotando un gol imborrable de la memoria de los zaragocistas. Tras un centro desde el costado derecho, el portugués conseguiría anotar el primer de sus dos goles en aquel encuentro a través de una preciosa chilena. El Real Zaragoza se acabaría imponiendo a la Real Sociedad por dos goles a cero y Hélder Postiga comenzaría una bonita relación con el gol bajo el calor de La Romareda.
Durante su primera temporada consiguió anotar hasta 9 tantos. El último, clave para conseguir la permanencia ante el Getafe. Durante su segunda temporada, el delantero portugués aumentó considerablemente sus cifras, llegando hasta los 14 goles. Insuficientes, ya que el Real Zaragoza acabaría sucumbiendo y dejando una plaza en Primera que todavía no ha recuperado. Por entonces, Postiga era el delantero de la selección portuguesa, y el acompañante de todo un Cristiano Ronaldo. Con el descenso del Real Zaragoza, Postiga pondría rumbo a la capital del Turia, dejando goles y más de tres millones de euros, cuyo destino es tan incierto como el posible regreso del Real Zaragoza a la Primera División.
El Pistolero Roger
Con el Real Zaragoza ya en Segunda División, era tiempo de buscar alternativas a la marcha de un delantero de talla mundial, internacional por Portugal y cuya salida dejaba un vacío difícil de cubrir. Tras intentarlo por todos los medios, Roger llegó al Real Zaragoza cedido sin opción de compra procedente del Levante UD. A sus 22 años, Roger aportó 12 goles, que no sirvieron para conseguir el principal objetivo de aquel año. Y el del siguiente. Y el de todos los años hasta el día de hoy. El Real Zaragoza no alcanzó el ascenso y tuvo que desprenderse de un Roger Martí que desde entonces ha seguido goleando para deleite de los aficionados del Real Valladolid y del propio equipo granota. Es más, El Pistolero de Orriols ha anotado 11 goles en 26 partidos en la presente temporada, siendo el tercer máximo goleador de LaLiga Santander y el líder por la carrera del Trofeo Zarra. Apenas estuvo un año bajo el calor de una Romareda que no olvidará dónde Roger dio sus primeros pistoletazos.
Borja Bastón y Willian José, una dupla letal
Comenzaba la segunda intentona por la reconquista de la Primera División. La dirección deportiva centraba sus esfuerzos en conseguir una plantilla competitiva desde sus puntas. Borja Bastón y Willian José eran los elegidos. El primero con 22 años y el segundo con 23 llegaban a La Romareda cedidos por Atlético de Madrid y Real Madrid respectivamente con el objetivo de relanzar sus carreras. Y vaya si lo hicieron. Ambos obtuvieron el pasaporte que les daría acceso a la Primera División. Sí, aquella a la que el Real Zaragoza no pudo acceder por un gol a falta de seis minutos para el final.
Borja Bastón fue el encargado de portar los goles durante la 2014/15, superando la barrera de los 20 goles, mientras que Willian José anotó 7 dianas. Caprichoso ha sido el destino. Borja ha visto como su producción goleadora descendía desde entonces, viéndose como una posibilidad su regreso a Zaragoza. Por su parte, el delantero brasileño se ha convertido en uno de los mejores nueves de LaLiga Santander, siendo el principal objetivo del FC Barcelona hace escasos dos meses. El tándem que formaron ambos en La Romareda será recordado por ser el que tan cerca estuvo de devolver al Real Zaragoza a la Primera que todavía anhela por volver a ver.
Ángel Rodríguez y una desafortunada salida
Ángel Rodríguez hizo magia. Literalmente. Pese a estar en la peor plantilla del Real Zaragoza durante dos años, el delantero tinerfeño se echó a la espalda un equipo que suerte tuvo de no haber sentenciado la historia de un club histórico. Durante su primera temporada en el Real Zaragoza, Ángel anotó 11 goles. El último en el famoso “desastre de Palamós”. Aquel partido marcó un punto y a parte en el Real Zaragoza. Pocos pudieron salir airosos de aquel partido. Ángel consiguió anotar un gol y maquillar con su esfuerzo lo que fue un desastre histórico.
La siguiente temporada, Ángel consiguió 21 goles, siendo el artífice de la salvación del Real Zaragoza. Sin embargo, sus polémicas declaraciones previas al último encuentro ante el Tenerife le costaron la renovación con el club maño: “Firmo marcar dos goles y que el Tenerife marque tres“. Sus palabras provocaron que su salida no fuera la que debería haber sido por sus méritos deportivos. Desde entonces, Ángel se ha convertido en un delantero referencia en Primera de la mano de José Bordalás, siendo un más que posible alineable en la selección española y estando, junto a Willian José, en la última lista del FC Barcelona para reforzar su delantera.
Borja Iglesias, el último ídolo entre los delanteros del Real Zaragoza
Encontrar ídolos se ha convertido en una más que complicada tarea para los aficionados del Real Zaragoza. Borja Iglesias fue el último jugador al que las nuevas generaciones pudieron ver como tal. Nombrado hijo adoptivo de Zaragoza, Borja Iglesias caló hondo en los corazones zaragocistas, dejando la huella del panda como recuerdo de una temporada que volvió a ilusionar al zaragocismo. Sus 22 goles, imitando a su tocayo Bastón, no fueron más que la culminación de una temporada al alcance de muy pocos. La 2017/18 fue, como todo lo que viene aconteciendo al Real Zaragoza —para lo bueno y para lo malo—, histórica. Tras una terrible primera vuelta, el equipo de Natxo González a punto estuvo de alcanzar el ascenso directo en una segunda vuelta antológica. Su hat-trick ante el Valladolid fue la guinda, clasificando matemáticamente al Real Zaragoza en la tercera posición para afrontar unos nuevos playoffs.
La historia ya la conocemos todos. El que perdona, lo paga. El Real Zaragoza falló y falló. Diamanka asestó el golpe final en el último minuto. Con esto se acabaría el sueño del Real Zaragoza, y las andanzas de Borja Iglesias por La Romareda. Hasta el día de hoy, Borja Iglesias sigue siendo abonado del equipo maño y no pierde la pista de todos y cada uno de sus movimientos. El último ídolo del zaragocismo, por entonces cedido sin opción de compra, no pudo agrandar su historia en el Real Zaragoza. Pero una posible vuelta a la élite del equipo zaragozano podría volver a abrirle las puertas.
La última sensación entre los delanteros del Real Zaragoza: Luis Suárez
Luis Suárez o Borja Iglesias. Papá o mamá. Así de complicado es elegir entre uno y otro. La irrupción de Luis Suárez ha causado furor entre la afición del Real Zaragoza, y entre el mundo del fútbol. Tras el final de esta campaña, el culebrón Suárez va a ser uno de los más calientes del mercado. Y es que el jugador es propiedad del Watford, pero su deseo es quedarse en Zaragoza. Mientras tanto, media Primera mira con recelo sus movimientos, atentos a una posible opción para ficharle. El colombiano ha conseguido, nada más y nada menos, que 17 goles en 29 partidos. Y eso que el colombiano ha errado hasta cuatro penaltis. Un dato que no afea en absoluto su rendimiento.
Luis Suárez ha levantado La Romareda como pocos jugadores han hecho nunca. Ni siquiera Borja Iglesias lo consiguió. Su garra, su ímpetu y su ambición han contagiado a la afición y a sus compañeros. No existen elogios para describir a la última joya que ha pulido el Real Zaragoza. A falta de terminar la temporada, Luis Suárez tiene la oportunidad de pulverizar los datos de sus predecesores en la última década. Además, el colombiano puede conseguir algo que no consiguieron ninguno de los anteriormente mencionados: ser el delantero del Real Zaragoza que volvió a la tan anhelada Primera División. Y aumentar el caché de una fábrica dedicada a la continua producción de nueves aptos para la élite y cuyo futuro no debiera estar más allá de las gradas de La Romareda.