El Club Rugby Teruel Mudéjar comenzó su andadura hace dieciséis años en la ciudad de Teruel de la mano de José Ignacio Villel. Este turolense se veía obligado a desplazarse hasta Zaragoza para poder entrenar y competir, lo que le motivó a poner en marcha el primer club de rugby de la ciudad. A día de hoy, aquel pequeño proyecto se ha convertido en una gran familia integrada por un equipo senior masculino de 30 jugadores, y durante años también han formado parte de ella un conjunto en categoría cadete y un equipo femenino. “La intención es que al curso que viene puedan retomarse estos dos equipos, cadete y femenino”, explica Pablo de Jaime, vicepresidente del Club Rugby Teruel.
De Jaime forma parte del equipo senior desde hace 9 años, pero antes de que él llegase, sus compañeros ya competían a nivel autonómico e incluso se habían proclamado campeones de la liga aragonesa en una ocasión. Poco tiempo después de su incorporación, el Club Rugby Teruel se cambió a la liga Valenciana “por proximidad y comodidad a la hora de viajar”, apunta el vicepresidente. No obstante, siguen ligados a competiciones aragonesas como son los torneos.
Este curso pasado, el equipo senior ha competido en el Grupo A de Tercera División en la Liga Valenciana. Tras jugar una primera ronda a principios de temporada por grupos geográficos, los turolenses lograron acceder al Grupo A, donde compiten los mejores clasificados y donde finalmente quedaron terceros. “Estamos muy satisfechos con el resultado de este año porque el curso anterior jugábamos en un grupo más bajo, en el B y allí quedamos primeros”.
El Club Rugby Teruel también sale al extranjero a jugar torneos, sobre todo de Rugby 7, a países como Irlanda, Francia o Italia y, además, realizan viajes de ocio para asistir a grandes encuentros en lugares como Madrid, Bilbao o Inglaterra. “El año pasado fuimos a unas finales europeas muy importantes que se celebraron en Ibiza y donde asistieron jugadores galeses profesionales, algo que hace mucha ilusión si eres aficionado del rugby”, explica De Jaime.
Deporte minoritario
A pesar de que este año el equipo senior ha logrado completar 30 fichas de jugadores, el club tiene problemas a la hora de encontrar nuevos jugadores. “Somos un deporte minoritario y desconocido en Teruel, además gente adulta hay pocos interesados en la ciudad y los chicos más jóvenes, la gran mayoría tienen que irse a estudiar fuera cuando llegan a la edad de entrar a la universidad”, apunta el vicepresidente.
“Somos un deporte minoritario y desconocido en Teruel”
Para De Jaime este es uno de los hándicaps de practicar un deporte como el Rugby en una ciudad pequeña como Teruel. El otro, es sin duda el frío que pasan los jugadores durante todo el periodo de competición. “La liga es en invierno y nosotros entrenamos los martes y jueves desde las 20:15 hasta las 22:00. Como podrás imaginar la climatología no acompaña a esas horas”, señala.
Además, está el asunto de la financiación. Los jugadores deben pagar al ayuntamiento de la ciudad por utilizar el campo entre 1.000 y 1.200 euros al año. “No apañamos como podemos vendiendo lotería, buscando patrocinadores, con subvenciones que nos da la Diputación, etc.”, explica De Jaime.
Nobleza y respeto
Pero jugar en la capital turolense también tiene cosas buenas. Para De Jaime algo que hace especial practicar el rugby en su ciudad es la camaradería que existe dentro del equipo. “El buen ambiente que hay es notable. Se han creado muchos vínculos de amistad entre jugadores y yo creo que eso al de fuera le sorprende. No sé si esto se da al mismo nivel en otros deportes, imagino que sí, pero en el rugby es muy evidente”, dice.
Sin embargo, el vicepresidente asegura que muchas veces cuando se piensa en el rugby todavía queda ese estigma de ver este deporte como una práctica agresiva. Quienes lo practican, aseguran que lejos de lo que pueda parecer, se trata de un deporte muy noble, de contacto, sí, pero en el que prima el respeto hacia el rival, los compañeros y también al árbitro cuyas decisiones rara vez son discutidas por los jugadores.
“El buen ambiente que hay es notable. Se han creado muchos vínculos de amistad entre jugadores y yo creo que eso al de fuera le sorprende”
Además, De Jaime asegura que en el Club Rugby Teruel hay cabida para todo el que este interesado, ya sea hombre, mujer, grande, pequeño, fuerte, delgado, etc. “Cada posición tiene una fisionomía, así que eso no es un problema. Precisamente en el equipo los mejores tienen más de 40 años”, asegura el vicepresidente del club.