La FIFA ha sancionado a Saman Ghoddos a no jugar durante cuatro meses y a pagar una indemnización al Huesca por un valor de 4 millones de euros. Debe abonarlo en un plazo “no superior a 30 días”, acaba de confirmar el club en una nota de prensa. Además, el Östersund FK (Suecia) no podrá firmar a ningún jugador durante dos ventanas. La decisión fue acordada por la Cámara de Resolución de Disputas del citado organismo. Tomó como referencia el artículo 17 partes 3 y 4 sobre la transferencia de jugadores. La decisión fue notificada a las partes interesadas el miércoles. Eso sí, la sentencia no es firme en cuanto que puede ser apelada. Hay tres semanas para recurrirla y el club sueco ha decidido ejercer su derecho.
Ghoddos, de Huesca a Amiens vía Suecia
El culebrón del futbolista de 25 años, nacido en Malmoë, pero internacional con Irán, arrancó poco después de llegar a la capital altoaragonesa y cuando se iba a desplazar a la concentración del equipo tras pasar de forma satisfactoria el preceptivo informe médico firmó por el Amiens francés traspasado por el club sueco. Por tanto, su incorporación al Huesca saltó por los aires al dar el jugador la espantada. Y los servicios jurídicos del Huesca denunciaron el caso ante la FIFA. El club azulgrana revindicó el pago de su cláusula de rescisión: 40 millones de euros.
En un comunicado que acaba de hacer público el Huesca, la entidad azulgrana subraya sobre la resolución de la FIFA por el caso Ghoddos que “concluye un tiempo de trabajo en silencio que es característico de la Sociedad Deportiva Huesca, de su Gabinete Jurídico y de todos los demás componentes del club”.