Frankie Ferrari, jugador del Casademont Zaragoza que se ha convertido en el ídolo de la afición ‘rojilla’ con tan solo dos partidos jugados en los que le ha cambiado la cara y al equipo y ha sumado sendas victorias, ha señalado que no se cree un héroe.
“No creo que sea un héroe, realmente todos somos piezas de un puzle y ya había buenos jugadores. Lo que interesaba era “cambiar la dinámica”, ha añadido en rueda de prensa. El estadounidense ha señalado que cuando llegó a la capital aragonesa en lo que pensaba era “en trabajar, ayudar a conseguir victorias y cambiar a positivo lo que es la dinámica”.
Breogán sin Musa
A este respecto opina que el objetivo es ir partido a partido, prepararse, entrenar e ir a por el encuentro del próximo sábado contra el Breogán. El base cree que el conjunto gallego es “igual de bueno” con Dzanan Musa, que tuvo que ser operado de urgencia tras el partido contra el Baxi Manresa por la fractura de la laringe y que será baja contra el equipo maño, como sin él.
Por ello piensa que el Casademont Zaragoza debe estar “igualmente preparado” para intentar lograr la victoria en Lugo. Con respecto al apoyo de la afición zaragozana, la ‘marea roja’, ha destacado que las sensaciones fueron “geniales”. “Me encantó la energía y la vida que nos dieron y los vamos a necesitar en el siguiente partido en casa, que aún queda trabajo” ha apostillado.
Confianza de Sakota
Ferrari ha desvelado que una semana antes de fichar por el equipo habló con el técnico, Dragan Sakota, para que le diera las claves del equipo y su forma de jugar. “Vi que creía en mi y me ha dado la misma confianza que me dio Pedro Martínez en Manresa. Eso me ha dado libertad. Me siento muy bien al poder desplegar todo mi juego en ataque”, ha finalizado.