Tres partidos y tres dibujos diferentes nos ha dejado la pizarra de Rubi en estas primeras jornadas de Liga. Entre medias, un buen ramillete de variaciones posicionales que ponen de manifiesto los recursos de la plantilla y la curiosidad del técnico en explorarlos.
La mejor manera para saber es preguntar y la mejor manera de conocer es explorar. Esto ha debido pensar el técnico azulgrana, Rubi, en estas 3 primeras jornadas de Liga, donde le hemos visto utilizar diversos dibujos en el campo y, a su vez, donde sus futbolistas han ocupado distintas demarcaciones. Si la diferencia entre éste y su predecesor -Anquela- parecía clara antes de comenzar, han bastado 3 jornadas de Liga para corroborarlo. Mientras uno es fiel a sus ideas, el otro, cual camaleón, anda buscando el hilo que mejor cosa el paño que le han encomendado. Una se ampara en la experiencia, la otra en la inquietud y ambas son válidas por igual.
Si en el debut en Soria el técnico barcelonés disponía un 4-2-3-1 sobre el terreno de juego que se asemejaba -al menos sobre la pizarra- al utilizado la temporada pasada por Anquela, en el debut en casa nos sorprendía -por lo desconocido que se nos hacía- con un 4-4-2 que tan buen sabor de boca dejó al respetable. Dos puntas -‘Cucho’ y ‘Chimy’- tan eléctricos como generosos en el esfuerzo que dejaron la sensación que están ansiosos de defensas complacientes tanto en juego como en velocidad.
Cuando todo parecía indicar que iba a repetir alineación y, por ende, esquema, el preparador azulgrana introducía otra pequeña variable en el partido disputado este sábado ante Osasuna, al disponer sobre el terreno de juego un 4-1-4-1 (de igual forma que algún tramo de la segunda parte ante el Lorca) y armar así al conjunto oscense de un trivote en su línea medular en busca de una mayor consistencia en el centro del campo que hiciera olvidar el primer patinazo en tierras sorianas.
Al ya mencionado doble pivote en Soria, hay que sumar los dos delanteros y el uso del trivote en algunas fases de la segunda parte ante el Lorca que, a la postre, le dieron la idea o solución para el encuentro disputado en El Sadar, donde además de continuar con el dibujo en la medular, la SD Huesca varió a sus hombres de banda y arriesgó jugando con 3 atrás en el último tramo.
Muchas y ricas variantes que dejan la sensación de que Rubi anda detrás de la disposición idónea que permita plasmar sobre el terreno de juego su idea de fútbol que desea aplicar. La plantilla es amplia en recursos y hasta la fecha le está permitiendo al técnico catalán utilizar muchas alternativas sin que estas estén mermado el nivel grupal.