El pasado sábado se celebró la XV Marcha Cicloturista Tarbes Huesca con la participación de una treintena de cicloturistas oscenses, que recorrieron los cerca de 200 kilómetros que separan ambas ciudades hermanadas.
La marcha comenzó con la tradicional foto de los participantes en la escalinata del Ayuntamiento de Tarbes bajo un cielo gris que presagiaba lo que decían los pronósticos, una suave lluvia y constante durante gran parte del recorrido por tierras francesas. Apenas realizados 2 kilómetros, en las afueras de la localidad francesa, empezó a caer una lluvia débil pero que acompañó a los ciclistas a lo largo de más de 30 kilómetros, momento en el cual incrementó su intensidad, bajando la temperatura y poniendo en duda a los participantes la posibilidad de suspender la marcha debido a las malas condiciones.
Decidieron continuar hasta Laruns, a pies del coloso Portalet, esperando que se cumplieran las previsiones y conforme se acercaran a la frontera,mejorase la meteorología. Si la previsión no se cumplía, la decisión de seguir o no se tomaría en la cima. Conforme fueron pasando los kilómetros de aproximación al puerto, la lluvia fue desapareciendo, subiendo poco a poco la temperatura y animando a los ciclistas a continuar. En torno a las 14.30, los oscenses llegaron a la cumbre del Portalet, bajo un cálido sol que permitió disfrutar de la comida picnic de hermandad en un marco increíble, con el Pirineo como hace mucho tiempo no estaba para estas fechas, en todo su esplendor.
Tras el pequeño descanso y digestión, continuaron la marcha ya por tierras españolas, pasando por Escarrilla, Biescas y Sabiñánigo, donde ya se empieza a vivir el ambiente de la QH. Antes de iniciar el último ascenso de la jornada, el puerto de Monrepós, los ciclistas se detuvieron para avituallarse de cara al gran esfuerzo y realizar un pequeño reportaje para Aragón Televisión, explicando la historia y la organización de la marcha.
El pelotón entró en Huesca a las 19.30 horas, escoltado por la Policía Local hasta la Plaza de Navarra, donde fueron recibidos por familiares y amigos. Se dió por finalizada esta quinceava edición con una cena de despedida en el Restaurante Merida.