ZARAGOZA | El Real Zaragoza vuelve a La Romareda y lo hace por dos motivos fundamentales: para despedirse de Cristian Álvarez y para medirse al Burgos. Casi por ese orden. Sobre todo si se atiende a la voluntad de una afición que ha perdido fe en la temporada, pero que mantiene intacto el cariño hacia su leyenda. “Yo solo buscaba la mirada del adiós”, cantaron Los Rodríguez, quizá el grupo argentino con mayor éxito en España. Y hoy encaja mejor que nunca para hablar de la despedida de Cristian Álvarez, un argentino que tomó un puente aéreo desde Rosario hasta La Romareda. Que encontró al niño en Zaragoza y convirtió La Romareda en su potrero.
En ese contexto tan emocional se enfrenta el Real Zaragoza al Burgos de Luis Miguel Ramis. El equipo del Plantío pelea abiertamente por la supervivencia. Es el segundo peor visitante de la categoría y, por tanto, uno de los rivales más peligrosos sobre la faz de la tierra para mañana. En su temporada han tenido que admitir un fracaso, que están lejos de su objetivo inicial, y que no han sido capaces de darle el vuelo que se esperaba a una plantilla con grandes nombres y malos engranajes. Curro Sánchez, Álex Sancris, Dani Ojeda o Fer Niño han sido futbolistas determinantes en la categoría, pero este curso no han logrado serlo. Y les ha costado mucho más a domicilio, en un registro que les pesa desde septiembre.
Una semana compleja, antes del Real Zaragoza – Burgos
Al margen del adiós de Cristian, no ha sido una semana sencilla en Zaragoza. Las lesiones han copado las portadas, con 21 bajas en el curso y más de media docena en la segunda vuelta. Reforzado en el centro del campo en el mercado, Ramírez se encuentra mañana ante un dilema. Debe elegir si arriesga con algún futbolista con limitaciones físicas, si cree en alguno de los secundarios o si apuesta por un hallazgo de cantera. En ese último contexto ni siquiera se descarta que Ramírez escoja a Lucas Terrer para esa línea, al que Ramírez llamó “Mi Luquitas” en un acto entre periodistas. Mientras medita un cambio de dibujo, dos puestos quedan claros a la espera de confirmar los dos siguientes. Kervin Arriaga volverá al medio campo y Francho ocupará otro de los sitios. Si Keidi Bare regresa a tiempo será con un punto de riesgo y está por ver si Ramírez le concede la titularidad a Aketxe o si cree en Bazdar para la zona del enganche.
En ataque se espera el estreno de Dani Gómez en La Romareda, que encontró vitamina en su primera tentativa. Pau Sans merece también repetir en el once titular y buscará su primer tanto en el campo de su vida. Las alternativas que maneja Ramírez son interesantes y futbolistas como Adu Ares o Adrián Liso pueden ser útiles en el desarrollo de las segundas partes. El ensayo de defensa de cuatro y el rombo, que desveló Aragón Deporte y molestó a Ramírez, no es todavía definitivo, pero sitúa a la defensa del inicio de curso como la primera entre todas las cábalas.
El adiós de Cristian Álvarez
El fútbol reúne a Zaragoza y Burgos en La Romareda, en un partido lleno de alicientes, que mezcla a dos equipos en suertes que no son suyas. A pesar de haberle ganado al líder la semana pasada, el Burgos no vence a domicilio desde siempre. El Zaragoza ha gafado el fortín de tanto nombrarlo y solo suma un triunfo en los últimos seis partidos en El Municipal. Uno de los dos pretende vencerle a su fama y romper sus últimas estadísticas. Cristian Álvarez será el protagonista del antes y el después. Y su equipo debe rendirle un homenaje también en el durante. Buscará reconquistar La Romareda. Y alcanzar un triunfo en el nombre de su última leyenda.
Posibles alineaciones
Real Zaragoza: Gaëtan Poussin; Iván Calero, Bernardo Vital, Lluís López, Dani Tasende; Kervin Arriaga, Francho Serrano, Lucas Terrer, Samed Bazdar; Pau Sans y Dani Gómez.
Burgos CF: Ander Cantero; Arroyo, Aitor Córdoba, Grego Sierra, Miguel; Atienza, Quintanilla, Sancris, Curro Sánchez, Dani Ojeda; Edu Espiau.