ZARAGOZA | El Real Zaragoza se enfrenta al Sporting de Gijón mañana (S-18:30, La Romareda), en un partido frontera, vital para la suerte de toda una temporada. Miguel Ángel Ramírez acumula un balance peligroso, próximo ya al cese. Le restan dos partidos de margen y nadie quiere ya ocultarlo. En rueda de prensa pareció un tipo herido, irascible, directo. Mostró grandes argumentos para cuestionar el modelo del Real Zaragoza y tuvo razón en muchas cosas. Pero su tesis se rebate con cierta sencillez: no hay victorias detrás de sus ideas. Y, sin ellas, hasta el mensaje más certero carece de fuerza en el fútbol.
El Real Zaragoza vs Sporting de Gijón y un balance en La Romareda
Curiosamente, el drama le enfrenta al Sporting de Gijón en una final que no solo se juega Ramírez, sino todo el Zaragoza. En el banquillo, la paradoja está escrita. El mismo equipo que le llevó a La Romareda le puede apartar de aquí. Será el Sporting de Rubén Albés, que tampoco encuentra la tecla de los aciertos. Su balance en la última decena de partidos compite con el de los maños. Coincide además en una idea: su equipo ha parecido mucho mejor sobre el cartel que sobre el césped.
En el plan de Rubén Albés hay talento y muchas soluciones: Dubasin, Nacho Méndez, Gelabert, Dani Queipo, Caicedo o Nico Serrano podrían ser los nombres de un aspirante. Pero comparten además un secreto y una decepción: no han logrado comportarse como una unidad, formar siempre un equipo. Ante ese contexto, el Sporting jugará con el tiempo y los nervios de La Romareda, también contra los precedentes. El equipo de Mareo no ha ganado en El Municipal en todos estos años de Segunda. Razón de más para tener un poco de miedo.
El plan de MAR
Difícil de descifrar, Miguel Ángel Ramírez ha dado pasos en falso en Zaragoza y giros de guion que no estaban previstos. Ha sido conservador y valiente al mismo tiempo. En un partido como el de mañana su propuesta quedará muy marcada. La duda estará en saber si MAR volverá a su plan original, a su sistema de cabecera o si creerá en una línea de cuatro. En un juego que siempre será más de futbolistas que de sistemas, el punto de partida puede parecer impopular o definitivo. Pero queda pendiente una idea: el dibujo que mejor le ha sentado a su equipo es el de tres centrales y no las acrobacias que han llegado más tarde. Y puestos a morir por una idea, quizá conviene que MAR elija la suya.
Si el equipo no funcionó cuando se estructuró desde atrás hacia adelante, quizá conviene empezar por el ataque. El regreso de Mario Soberón sirve como aliciente y la figura de Pau Sans también alegra todas las reservas. Está por ver cómo sitúa a Kervin Arriaga en su plan, que parece en solo dos meses la llave maestra de este Zaragoza. Francho Serrano volverá a ser capitán y las piernas de este Zaragoza, mientras se espera el resurgir de Keidi Bare, la aparición de Aketxe y una versión lúcida o solo reconocible de Samed Bazdar.
El partido ante el Sporting de Gijón estará marcado por la tensión y por el drama. Los caprichos juegan también en la balanza, en el partido que sigue a la despedida de una leyenda. Con menos paraguas que nunca, en La Romareda se jugará un partido de la verdad, uno de esos días en los que solo vale ganar. La grada también será un elemento clave en el relato, en una cita urgente para todo un club. En un partido frontera para MAR y más todavía para el Real Zaragoza.
Posibles alineaciones:
Real Zaragoza: Joan Femenías; Iván Calero, Bernardo Vital, Jair Amador, Dani Tasende; Kervin Arriaga, Francho Serrano, Keidi Bare, Pau Sans; Samed Bazdar, Mario Soberón.
Sporting de Gijón: Rubén Yañéz; Nicola Maras, Rober, Diego Sánchez; Kevin Vázquez, César Gelabert, Nacho Méndez, Carlos Dotor, Nico Serrano; Caicedo y Dubasin.