ZARAGOZA | La Copa del Rey siempre fue el territorio de las sorpresas, también de los hallazgos. Hoy el Real Zaragoza lo busca con el delantero de su filial: Aitor Mañas. El ariete madrileño, de 21 años, vivirá su primera convocatoria en La Romareda. Se trata de un delantero alto, de poderosa zancada, fino en el juego y que maneja los secretos del remate. Puede salir del área y asume los golpes, con el barniz del que entiende el juego. Su mejor condición es el instinto, su capacidad para hacer suyos los balones muertos.
Mañas aterrizó el curso pasado en La Ciudad Deportiva, procedente del Celta de Vigo. En Galicia firmó un tramo soñado, donde acumuló elogios y grandes registros. Partía de la cantera del Real Madrid, donde había llegado en edad infantil. Su progresión, orgánica y bendecida por Raúl González, tuvo un parón en juveniles en La Fábrica. Mañas entendió entonces que la marcha era su la mejor salida. Descubierto en su origen por el Rayo Vallecano, Mañas asomará su cabeza en el fútbol de élite en Zaragoza.
La tutela de Emilio Larraz le ha hecho madurar en sus dos últimas temporadas. Firmó dobles dígitos en el curso pasado, alcanzando los 11 tantos y, tras superar una lesión en el inicio de este, ya ha retomado su mejor nivel en las últimas jornadas, cosechando 5 en 747 minutos disputados. Tiene gol y su clave reside en su tren inferior y en su inteligencia: sabe guardar el balón, entiende el juego colectivo y lee como nadie los rechaces.
La Copa espera como un bálsamo al Real Zaragoza y Mañas puede ser un bonito descubrimiento.