Los 11.000 participantes que disputarán las dos pruebas cicloturistas de la XXVI edición de la Quebrantahuesos han supuesto todo un reto para la organización cuya labor ha consistido en elaborar un plan adecuado y eficaz para satisfacer las necesidades de todas aquellas personas que harán, de este año, la edición más multitudinaria de su historia.
Este año, la situación previa de la Quebrantahuesos podría describirse con una sola palabra y es récord. La competición ha ampliado fronteras hasta límites inesperados que se reflejan en las 29 nacionalidades representadas en los 11.000 deportistas, unos datos internacionales superiores a ediciones anteriores, tal y como ha ocurrido en el número de inscripciones recibidas para el sorteo de plazas con 18.893 peticiones. Que la Quebrantahuesos comienza a ser una de las carreras cicloturistas más importantes de toda España, ya es un hecho, y esto supone que la capacidad de respuesta ante la demanda de una mayor cantidad de afluencia se hace mucho más compleja puesto que no solo hay que tener en cuenta a los propios participantes, sino a la masa que esta cita deportiva moviliza, con todos los acompañantes o turistas que son atraídos a Sabiñánigo.
Sin embargo, el aumento de afluencia de la competición ha significado ciertas facilidades para la organización debido a que se ha captado la atención de muchas empresas que no han dudado en patrocinarse durante esta jornada hasta el punto en el que la zona expo contará con un total de 60 marcas entre las cuales destacan las principales colaboradoras desde productos de alimentos y bebidas como Ambar, Powerade, Nutrisport, Powerbar, Del monte, Kaiku, Filipinos, Aneto; o relacionados con el mundo del deporte como Buff, Mavic, Bio racer, Chain Reaction Cycles, Ciclismo a fondo, etc.
Cifras como los 6.000 kg de fruta o las 10.500 raciones de comida muestran la enorme preparación que ha exigido esta vigésimo sexta edición.
Con este arma del patrocinio, la Quebrantahuesos ha podido paliar de una forma mucho más efectiva el reto que se les presentaba sobre cómo poder hacerse con tal cantidad de suministros. De esta manera, se han calculado las diferentes cantidades que se van a mover durante el próximo sábado 18 de junio y los resultados impresionan.
Cifras como los 6.000 kilogramos de fruta o las 10.500 raciones de comida muestran la enorme preparación que ha exigido esta vigésimo sexta edición. Las bebidas se encuentran en torno a los 30.000 litros de agua, 27.000 litros de bebida deportiva y 9.000 de cerveza.
Todos estos suministros se encontrarán tanto a lo largo de la recorrido de la Quebrantahuesos y la Treparriscos, como en la Zona Expo donde, mediante la pulsera o el ticket, se podrá pedir un plato de paella valenciana en una gran carpa de circo ubicada en las parcelas anexas al boulevard y próximas a la llegada. Además, todos los participantes tendrán también cerveza gratuita mostrando la pulsera de participante. También habrá instalaciones de servicio en el Pirenarium para atender a aquellos que no participen en las cicloturistas.
Los avituallamientos que se distribuirán a lo largo de la Quebrantahuesos serán ocho, ubicados en el Puerto de Somport; entre Escot y el Puerto Le Maneblanc; entre este último y Bielle, después de Les Eaux-Chardes; en Artouste; en la zona de Formigal; en Hoz de Jaca y, por último, en la llegada a Sabiñánigo. En cuanto a la Treparriscos la conformarán un total de cuatro puestos de avituallamiento situados en Biescas, en el Puerto de Cotefablo, en Fiscal y en Sabiñánigo, donde se encontrará la meta. Toda una preparación que, como cada año, cumplirá con las expectativas permitiendo el auge de un evento que se engrandece por momentos.